Santi Tarrío ya es jugador del European Tour para la próxima temporada. El líder absoluto de la Road to Mallorca acabará entre los 20 primeros del ranking pase lo que pase y logrará el billete a la primera división. A partir de aquí, lo único que le queda es mejorar todavía más su situación. ¿Y cómo puede hacerlo? Muy fácil y complicado a la vez: ganando un tercer torneo en lo que resta de temporada.
Este se ha convertido ahora en el gran objetivo de aquí a final de año. Si logra una tercera victoria ascenderá inmediatamente al European Tour y pasará a jugar con los mejores desde la semana siguiente. La misión es difícil, pero tan golosa que no deja de ser un aliciente brutal semana a semana. En este sentido, a Tarrío le quedan 17 torneos para conseguirlo, 17 bolas de partido. La primera se pondrá en juego desde este jueves en el Open de Bretaña.
El torneo se celebra en el Golf Bluegreen de Pléneuf Val André, un recorrido donde el golf español ha cantado victoria en 2016 con Álvaro Velasco y donde han triunfado golfistas de renombre como Eddie Pepperell, Benjamin Hebert o Andrea Pavan. Santi Tarrío es el mascarón de proa de una delegación española nutrida y poderosa, formada por 14 jugadores. Las ausencias más destacadas son las de Alfredo García Heredia, al que ya le tocaba descansar tras jugar nueve de las últimas diez semanas, jamás en su carrera había jugado tanto de manera tan seguida, y Eduard Rousaud, al que le ha ocurrido algo parecido, ya que ha jugado diez de las últimas trece semanas.
Así las cosas, la representación española en Francia está compuesta por Ignacio Pons. José Luis Adarraga, Alex del Rey, Lucas Vacarisas, Javier Sainz, Manuel Elvira, Emilio Cuartero, Santi Tarrío, Scott Fernández, Toño Hortal, Iván Cantero, Jordi García del Moral, Borja Virto y David Borda.
