Esta semana se juega el Foshan Open, último torneo del calendario regular del Challenge Tour antes de la Final de la Road to Ras Al Khaimah, en la que entran sólo los 45 mejores del ranking. Esta será precisamente una de las grandes luchas que se van a desarrollar en el Foshan Golf Club (Foshan, China), pues hay un buen puñado de jugadores que aún necesitan ganarse una plaza en la citada Final.
El asunto cobra mayor interés al encontrarnos ante la cita que más dinero reparte del año (500.000 dólares) en este circuito (con permiso del Kazahkstan Open y según como ande el cambio del dólar, ya que los ‘pelotazos’ pueden estar a la orden del día. Emilio Cuartero, por ejemplo, uno de los tres españoles presentes y actual número 54 de la Road, necesitaría algo así como un octavo puesto para alcanzar este objetivo (son cálculos aproximativos, a vuela pluma, no exactos).
Los otros dos son Adri Arnaus y Borja Virto. El primero sale con la idea de apuntalar su excelente posición (número 9 de la Road) y mejorarla. El segundo necesitaría algo así como un tercer puesto en solitario para llegar a la Final dentro del top-15, que sigue siendo el gran objetivo. Por cierto, Cuartero también se podría meter en dicho top-15 con un segundo puesto en solitario. Ambos se han dejado muchos deberes para el final, aunque Virto sí parece tener pie y medio en la Final (ahora mismo es el número 41 de la Road), pero mientras haya vida, buena actitud y un cheque como el de esta semana, siempre hay esperanza…
Los precedentes, desde luego, son sobresalientes para el golf español, pues en las cinco ediciones disputadas de este torneo tenemos ya dos triunfos patrios, el de Nacho Elvira en 2013 y el del propio Virto en 2015.
