Adriá Arnaus (-10) ha entrado en órbita en los nueve segundos hoyos de la tercera jornada del Swiss Challenge. Hasta ese instante, marchaba con un discreto parcial de par tras haber cometido dos birdies y dos bogeys. Sin embargo, en el hoyo 10 algo hizo clic y comenzó a volar por el recorrido Golf Sempachersee de Lucerna.
Para empezar encadenó tres birdies consecutivos en los hoyos 10, 11 y 12, siguió con uno más en el 14, para acabar rematando la faena con un soberbio eagle en el 17. Puerta grande. El golfista catalán ha firmado 29 golpes en los segundos nueve y se ha disparado en la clasificación hasta colocarse en la sexta posición.
Ahí está otra vez Adriá, arriba del todo, codeándose con los mejores, peleando por la victoria. Es la bendita costumbre que ha adquirido en las últimas semanas, pues conviene recordar que suma ya tres top ten seguidos en el Challenge. Finalmente, entregó una tarjeta de 65 golpes, la tercera mejor del día en suiza y se encuentra a ocho golpes de la cabeza.
Así que, ¿realmente tiene opciones de ganar? Pues todo está en manos de Marcel Schneider (-18). El alemán domina con puño de acero el torneo. Tiene cinco golpes de ventaja sobre el segundo clasificado, el noruego Kristian Krogh Johannessen, y siete sobre la tercera posición que comparten Garrick Porteous y Julian Kunzenbacher. Arnaus está muy lejos de Schneider, cierto, pero es sólo uno y un mal día lo puede tener cualquiera. A poco que no le salgan las cosas al líder se abrirá el melón por el triunfo y ahí sí podría estar el español. No en vano, tiene la segunda plaza a apenas dos golpes. Su final de vuelta hoy, con los 29 golpes y el eagle en el hoyo 17, será una motivación añadida para afrontar este domingo la última ronda.
En cuanto al resto de españoles, notable día del movimiento de Sebastián García Rodríguez (-7). El madrileño se ha metido en el top 20 del torneo con una ronda de 67 golpes. Más atrás, aunque todavía con margen de remontar, están Jacobo Pastor (-3), Borja Virto (PAR) y Carlos del Moral (PAR), que hoy vivió un día complicado en la oficina con 76 golpes.
