Jon Rahm es el mejor jugador en el Earth Course de Jumeirah de todos los que disputan este año la Final de Dubai. No es una apreciación subjetiva, ni una deducción más o menos atrevida por sus excelentes resultados en sus tres participaciones previas. Se trata de un dato objetivo. Es la media de golpes en el recorrido dubaití. Nadie ha volado más bajo que el león de Barrika.
Tanto es así que Jon es el único de los 41 jugadores que no son debutantes en esta edición de 2022 que baja de 68 golpes. Concretamente, su media en las doce rondas que ha disputado hasta el momento es de 67,66. Una barbaridad. Este despliegue de golf se ha fraguado en un balance fabuloso de dos victorias y un cuarto puesto en tres apariciones. Es el mejor de largo.
Rahm le saca casi un golpe al segundo clasificado en este ranking, que no es otro que Rory McIlroy. El noirlandés acredita una media en Jumeirah de 68,52, una cifra igualmente extraordinaria, puesto que el vigente Número Uno del mundo lo ha hecho en 44 vueltas. Viktor Hovland y Matthew Fitzpatrick completan la nómina de golfistas que bajan de 69 golpes en la Final de Dubai, aunque el noruego lo ha hecho en apenas cuatro rondas y el campeón del US Open acumula ya la interesante cifra de 28 vueltas.
A la luz de los datos resulta evidente que a Jon se le da muy bien el Earth Course de Jumeirah, aunque por supuesto también tiene su kriptonita particular. Se trata del hoyo 17, el único de todo el recorrido del desierto al que aún no le ha hecho un birdie. Concretamente, su balance es de 11 pares y un bogey. Lo cierto es que el hoyo 17 es un par 3 bastante monstruito. El parcial de McIlroy en este hoyo, por ejemplo, es de +3, aunque el norirlandés sí ha sido capaz de arrancarle hasta cinco birdies.
Los bogeys en la Final de Dubai son una rara avis para Rahm. La estadística dice que comete un bogey o peor (el único doble bogey que ha hecho aquí en su carrera) cada 11,3 hoyos. Ha jugado un total de 216. Su acumulado total en el campo es de -52, con un parcial de -16 en los primeros nueve y -36 del 10 al 18, la auténtica mina de oro de Jon.
Si volvemos a la media de golpes de todos los golfistas que participan esta semana y que ya han estado antes aquí, resulta que sólo nueve consiguen bajar de 70 golpes. A los citados Rahm, Rory, Hovland y Fitzpatrick, hay que unir a Tyrrell Hatton, Min Woo Lee, Tommy Fleetwood, Shane Lowry y Adrián Otaegui. El golfista de San Sebastián tiene una media acreditada de 69,91 golpes en doce rondas.
Si le damos la vuelta a esta clasificación por media de golpes, el peor de todos es Kurt Kitayama con 74 golpes, aunque sólo ha jugado cuatro rondas. Después de él vienen Romain Langasque (72,25), Eddie Pepperell (71,94) y Richard Bland (71,87).
