Pep Anglés (+10, vuelta final de 77 golpes) ha finalizado el Open de España en 19ª posición, pero anduvo completamente metido en la pelea por el triunfo hasta el hoyo 65 del torneo. En el 11 de Valderrama, par 5, perdía dos bolas desde el tee y se esfumaba el bonito sueño. «Fallé la primera por la derecha y después un error de concentración me llevó a perder la segunda por la izquierda», explicaba el barcelonés con aplomo al finalizar la jornada.
No hace falta siquiera señalar que su semana ha sido grande, a pesar de los pesares. Salta a la vista. Digamos que por primera vez se ha mostrado al mundo. Y, sobre todo, ha enseñado algunas virtudes que a su edad pueden valer su peso en oro en la jungla de deporte de élite: tranquilidad, temple, equilibrio, orden y confianza en la estrategia…
«Me quedo con todo lo positivo. He estado incluso luchando por el triunfo en mi primer torneo como profesional en el circuito europeo. Y también me quedo con los últimos cuatro hoyos, porque me he recuperado y he hecho cuatro pares para acabar, algo que no había conseguido en las tres rondas anteriores en esos hoyos», ha señalado.
Sea como fuera, apenas unos minutos después de haber embocado el último putt, parecía tener bien anclados los pies al suelo: «he estado cerca de meterme en el siguiente torneo del European Tour, pero creo que mi sitio este año está en el Challenge, a ver si sale una buena temporada y consigo meterme por ahí», puntualizaba.
