Royal Aberdeen, uno de los mejores links del mundo, acoge un torneazo que sirve de test para el Open Championship
Aquí uno paladea la historia, se empapa de tradición y de leyendas, imagina tiempos lejanos en la costa del Mar del Norte, yerma de vegetación, y a varios paisanos divirtiéndose con un palo y una bola sin prestar atención a la ventisca o al aguacero.
Royal Aberdeen, donde mañana se alza el telón del Open de Escocia, es el sexto club de golf más antiguo del mundo (1780). Por aquellas tierras nació el golf. Un respeto y una reverencia. Recupera la esencia esta cita después de varios años compitiendo en campos ‘modernos’, no a la vieja usanza: el hombre contra los elementos naturales.
Puede presumir de ser considerado por muchos como el mejor links de Escocia, o sea, el primero del planeta. Ahí es nada. Corto para esta época de atletas fornidos (6.867 yardas) presenta una interesantísima parrilla de salida, aparte de los premios para los tres últimos rezagados que quieran disputar el Open Championship la próxima semana. Hablando del British, ésta será una prueba de fuego para preparar a conciencia la engalanada cita de la vuelta de la esquina en Royal Liverpool…
Richie Ramsay, quien aprendió desde mozalbete en este prestigioso campo, estima que el recorrido es realmente magnífico: “Ganará el que haga de todo; no se trata sólo de embocar putts, ni sólo estar certero con los hierros, ni tener una gran fuerza mental… sino quien disponga del paquete completo será el vencedor. Por eso es un gran campo”.
Entre la nómina de aspirantes, que los hay a manojos, llega con una motivación extra Phil Mickelson, que el año pasado rompió moldes al vencer el Open de Escocia y justo después levantar la Jarra de Clarete del British. Inaudito. Lefty busca otro reto: ser el primero que reedita el triunfo en esta cita.
La cuesta será empinada para el yanqui observando detenidamente el ‘field’. Compartirá partido con Luke Donald y Joost Luiten; justo detrás viene una terna de renombre, con el líder de la FedEx Cup, Jimmy Walker, junto a Miguel Ángel Jiménez e Ian Poulter, golfistas de raza; a continuación están Rory McIlroy, Thongchai Jaidee y Jamie Donaldson. Esta tropa sale en el turno matutino, pero por la tarde no baja el nivel: Lee Westwood, Stephen Gallacher y Justin Rose (reciente ganador en Estados Unidos); Thomas Bjorn, Victor Dubuisson y Rickie Fowler; Jonas Blixt, Paul Lawrie y Ernie Els…
Curiosamente, Rafa Cabrera Bello tendrá a dos vigilantes de la Ryder a su vera: José María Olazábal, el capitán del milagro de Medinah, y Paul McGinley, su sucesor para Gleneagles el próximo septiembre. Más chicos de la Armada, además de los citados, quieren hacer ruido en tan insigne campo; por orden de salida del jueves son Nacho Elvira, Adrián Otaegui, Álvaro Quirós, Pablo Larrazábal, Alejandro Cañizares, Jorge Campillo, Eduardo de la Riva y Carlos del Moral. Horarios.
