Da igual que sea en un torneo de mayor o menor calado, porque además casi resulta igual de complicado. El caso es echar a rodar el contador para ver las cosas de otra manera. Con el colmillo más afilado. Jorge Campillo (-6) buscará a partir de este sábado su primera victoria en el circuito europeo después de firmar un 69 en la segunda jornada del Tshwane Open. Está a cuatro golpes de los líderes, Scott Jamieson y Alexander Bjork, pero en el Pretoria Country Club todavía tienen que pasar muchas cosas y esa diferencia no es demasiada a falta de dos rondas. Un buen día del movimiento, eso sí, se antoja indispensable.
El extremeño, que el año pasado se metía por primera vez en la Final de Dubai, está disputando su torneo número 171 en el European Tour y ya sabe lo que es pelear por el triunfo, pero nunca hasta la fecha ha podido rematar esa semana que pueda cambiar su carrera. Porque si algo tienen claro quienes conocen bien a Campillo es que esa primera muesca puede hacerle subir tres o cuatro escalones de una sentada. Para ello, lo mejor sería que recuperara al menos los porcentajes del jueves en número de calles cogidas, porque ya se sabe que de otro modo se hace difícil avanzar en un recorrido con un rough tan salvaje y desigual.
Pep Anglés (PAR), después de pasarlas canutas (hoy, vuelta de 74 y un solo birdie en la tarjeta), se ha metido finalmente en el corte y es el único español que lo ha hecho además de Campillo. Otro fin de semana para seguir aprendiendo y con mucho terreno por delante para remontar. Suma, además, cinco de seis cortes en lo que llevamos de temporada, una cifra más que notable. Nacho Elvira (+1), Adrián Otaegui (+2) y Eduardo de la Riva (+5) se han quedado fuera, al igual que algunos claros favoritos a la victoria final, como los locales Van Zyl y Coetzee. Otro sudafricano, Thomas Aiken (-8) toma su relevo después de entregar un 62.
