Jorge Campillo ha dado un espléndido salto en su carrera en 2018. Ha sido la temporada en la que ha debutado en los World Golf Championship y en los Majors. Se ha metido en el top 100 mundial y ha sumado siete top ten en 27 torneos. Es decir, en menos de uno de cada cuatro semanas ha finalizado entre los diez primeros. Nunca antes en su carrera había hecho tanto top ten. También es la primera vez que consigue tres top 3 en un solo año. Sólo faltó la guinda de la victoria para redondear un curso sobresaliente.
Pese a los buenos números y el paso adelante serio y decidido que ha dado, Jorge no se conforma. Quiere más. Desea seguir progresando y aspira a meterse en el top 50 del ránking mundial. Ha probado la medicina de los WGC y Majors y ya no quiere dejarla.
El golfista de Cáceres tiene claro que uno de los principales márgenes de mejora es el putt. De tee a green es de los jugadores más sólidos del European Tour, por lo que el siguiente paso es intentar ser un poco más efectivo cerca del hoyo. Sus números no están mal, ni mucho menos. De hecho, según las estadísticas del European Tour, acabó 2018 entre los diez mejores del circuito en golpes ganados con el putt, pero claro la diferencia de un putt más o menos por vuelta puede ser clave para ganar torneos.
Por este motivo, en Dubai, durante la final del European Tour, mantuvo un breve encuentro con el gurú de putt, Phil Kenyon, uno de los ‘coaches’ más reputados del mundo en esta materia. Intercambiaron impresiones. Jorge le mostró su deseo de tener alguna sesión de trabajo con él para decidir si empiezan a trabajar juntos. Lo que le contó Kenyon le gustó y quedaron en verse en Londres durante las vacaciones de Navidad.
Ya desde el principio, Kenyon, en un acto de honradez, le dijo a Jorge que su cartera de clientes está ahora mismo desbordada. No puede coger a más jugadores, pero le puso en contacto con su asistente y mano derecha, Mike Kanski, otro excelente maestro que ya trabaja a tiempo completo con Matt Wallace, Eddie Pepperell o Lucas Bjerregaard, todos ellos ganadores en 2018 y top 50 del mundo.
Así las cosas, Campillo se vio este pasado fin de semana previo a Nochebuena con Kanski. Estuvieron en las oficinas de Kenyon en Londres y la sesión de trabajo fue muy productiva. “Me gustó mucho. Aún no he decidido si trabajaremos juntos durante el año que viene, pero la verdad es que me dijo un par de cosas muy interesantes”, señala Jorge a Ten Golf.
“Me gustó mucho. Aún no he decidido si trabajaremos juntos durante el año que viene, pero la verdad es que me dijo un par de cosas muy interesantes”
Queda por ver, por tanto, si la relación profesional se establecerá, pero por lo pronto es un paso adelante para seguir progresando en todo lo necesario para ser cada día un mejor jugador.
