La escalada de tensión que se vive en Oriente Medio después del ataque estadounidense el pasado 3 de enero que acabó con la vida del general Qasem Soleimani y la posterior respuesta iraní lanzando misiles a dos bases de EE.UU. en Irak podría tener influencia en el mundo del golf.
Al menos un jugador norteamericano, Bryson DeChambeau, se está pensando seriamente si debe acudir o no al Abu Dhabi HSBC Championship de la próxima semana en el que su presencia estaba confirmada y al Omega Dubai Desert Classic de la siguiente, en la que defiende título.
‘Fichajes’ de lujo para una Gira del Desierto de altos vuelos
Antes incluso de la respuesta iraní al ataque autorizado por Donald Trump de principios de año, DeChambeau, durante una retransmisión en streaming de una partida suya a un famoso videojuego, dijo: «En serio, es posible que no vaya a Abu Dhabi. Ningún estadounidense puede ir a esa zona, es una locura. Pero yo protejo y amo a mi país».
Más tarde, añadió: «¿Cuándo sabré con seguridad sobre Abu Dhabi? Bueno, supongo que el martes…». Una afirmación que invitó a Golf Channel a contactar con el agente de Bryson, Brett Falkoff, que trató de restar importancia a las palabras de su cliente, pero sin dar garantías de su presencia en el torneo.
Brooks Koepka arrancará el año jugando una exhibición en Abu Dhabi
«En este momento, Bryson todavía está comprometido con jugar allí, pero estamos monitorizando la situación en Oriente Medio«. DeChambeau es uno de los tres jugadores estadounidenses de primer nivel con los que cuenta el torneo de Abu Dhabi, además del Número 1 del mundo, Brooks Koepka, y de Patrick Cantlay. Otros jugadores de Estados Unidos como Phil Mickelson, Dustin Johnson, Tony Finau o Patrick Reed se han comprometido a su vez con alguno de los otros torneos de la Gira del Desierto.
