Final de la primera ronda del Open de Sudáfrica. En un Durban Country Club (Durban, Sudáfrica) maltratado severamente por la lluvia torrencial del jueves, pero que no ha perdido su encanto, el poderoso golf sudafricano ha desplegado todo su intimidante arsenal. Sólo los nombres quitan el hipo, pero entre medias hay un valenciano dispuesto a todo…
Antes de nada vayamos con los planes de la organización para el desarrollo final del torneo. El corte se producirá mañana al término de la segunda jornada, si el tiempo lo permite, y será de cincuenta jugadores y empatados (aunque lógicamente recibirán su correspondiente cheque los primeros 65 y empatados). A partir de aquí, el domingo se intentará exprimir al máximo la jornada para disputar 36 hoyos si es posible. Según se deduce, en estos momentos sigue sin existir la más mínima intención de llevar el final del torneo al lunes, debido a los citados trastornos que ello podría provocar en los aeropuertos a los jugadores en estas fechas del año (sobre todo a los europeos).
El líder sigue siendo Retief Goosen (-8), si bien el alemán Alex Cejka (-8) ha conseguido igualar por la tarde su registro matutino de 64 golpes. Curiosamente, el turno vespertino ha terminado arrojando mejores registros que el de la mañana (VER CRÓNICA DE LA MAÑANA). Justo detrás de ellos se sitúan Ernie Els (-7) y Charl Schwartzel (-7), y no podemos obviar a Richard Sterne (-6), ni Louis Oosthuizen (-5), para terminar de describir el impresionante asalto al galope sudafricano. En realidad, habría también que destacar el hecho de que hasta trece sudafricanos copan las primeras veinte plazas, por más que sean mayoría aplastante en el field del torneo.
Y ahí, desafiante y pleno de confianza, encontramos a Carlos del Moral (-6, 5º puesto), a sólo dos golpes de la cabeza y aún jaleado por el cuhtazo de adrenalina de su segundo puesto en la Final de la Escuela. Aún siente ese magnífico 'vértigo' en la boca del estómago…
El joven valenciano demuestra que el estado de su juego continúa de dulce. Hoy ha pateado de cine (16 putts en 11 greenes cogidos en regulación), y eso es mucho decir en unos greenes que no ayudan nada al jugador. Están en muy mal estado. Irregulares y traicioneros. El temporal los ha acabado de machacar. Va a ser muy interesante comprobar si mañana puede seguir dando réplica al despliegue sudafricano. Sería magnífico que a las primeras de cambio consiguiera meterse el domingo en los últimos partidos, quizá acompañado de alguno de los monstruos locales.
Y así es como ha jugado hoy Pablo Martín (-1), junto a Ernie Els y Tim Clark (-3). El malagueño ha pagado caros dos errores puntuales que le han costado sendos dobles bogeys. También se ha dejado por el camino alguna opción muy buena de birdie, lo que tampoco debe asombrar en vista del estado de los greenes.
El corte de cincuenta y empatados se sitúa ahora mismo en -2, al alcance todavía de todos nuestros jugadores. Pero mañana va a haber tortas por meterse ahí…
