José María Olazábal llega campechano como siempre. Saluda a unos y otros. Bromea. Ni cansancio, ni jet lag. Su regreso del Masters no le pasa factura.
Ni siquiera los 600 kilómetros que se ha metido entre pecho y espalda en coche para llegar a El Saler desde Fuenterrabía. Aún no sabe lo que le espera…
El capitán de la Ryder Cup de Medinah se coloca en el centro para realizar la foto tradicional de la Armada previa al Open de España. Cerca de Gonzaga Escauriaza, presidente de la Federación Española, y de Gonzalo Fernández Castaño, que también ha llegado este mediodía al campo valenciano directamente desde Augusta. Lo que parece una simple foto inocente se convierte en un grito unánime pronunciado por toda la Armada: «Olazábal, Príncipe de Asturias». No suena nada mal.
Olazábal no se lo cree, hasta se ruboriza. «Venga ya, qué es esto…», dice con su humildad proverbial. Pero la ‘encerrona’ ya está hecha. Chema se pone tan colorado como su polo.
No es un grito que se lleve el viento de El Saler, que ya sopla, como se espera durante toda la semana. Es una convicción. La Real Federación Española de Golf ha propuesta a Olazábal para el premio del deporte más importante y el respaldo es absoluto.
Su compañero de Masters, Gonzalo Fernández Castaño, lo tiene claro. «Si hay alguien que encarna perfectamente las virtudes del Príncipe de Asturias es Chema. Qué voy a decir de él si es mi mentor. Además de un grandísimo deportista es una persona espléndida, muy humilde. El año pasado se lo llevaron Xavi y Casillas y fue un poco raro. Dárselo a Olazábal sería una excelente manera de recuperar el prestigio», explicó.
El Open de España ya está en marcha. Gonzaga Escauriaza lo define con una palabra: «ilusión». El presidente nos da la bienvenida a El Saler e invita a todos los amantes del deporte a que se acerquen esta semana a Valencia para ver un espectáculo deportivo fantástico. «Tiene todos los ingredientes para ser un Open de España extraordinario», resume.
Si alguien no tiene muy claro cómo es El Saler, cómo definirlo, Gonzalo Fernández Castaño nos echa una mano: “es una obra de arte que hay que conservar como si fuera un Picasso o un Dalí. Es mi campo preferido en España, es un diseño indescriptible, de los que ya no quedan”, insistió el madrileño antes de admitir que llega “cansado psicológicamente tras una semana en Augusta, pero con muchas ganas de hacerlo bien”. Según sus propias palabras, llega a Valencia en su mejor momento de forma, aunque si tiene que señalar un favorito, apuesta por Sergio García.
Además, el madrileño calificó su actuación en Augusta como de “bastante buena”, aunque le dejó un sabor agridulce. “Estuvo bien, pero me he ido de allí con la espinita de no haberlo hecho aún mejor, especialmente el último día. No llegué a patear del todo bien”, comentó
Tras jugar dos torneos en Estados Unidos –el Valero Texas y el Masters– Gonzalo Fernández-Castaño afronta un Open de España al que le tiene ganas. Ha demostrado que se encuentra en un gran momento de forma y, pese a que está centrado en hacerse un hueco en el PGA –“es mi gran objetivo para este año”-, no quiere dejar de hacerlo bien en su país.
