Rafa Cabrera Bello (+1) ha comenzado el Open de España con una vuelta de 73 golpes. No es el inicio soñado, ni siquiera esperado, pero el canario ya sabía que iba a ser una jornada difícil y complicada. Aterrizó en Barajas ayer pasadas las diez de la noche y no se pudo meter en la cama hasta después de las doce. Y después, claro, el jet lag al ataque, ojos como platos hasta las cuatro y media de la mañana, una siesta de una noventa minutos y a las seis en planta camino del Centro Nacional de Golf para empezar el Open.
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Rafa ya sabía que no era la mejor manera de preparar el torneo, pero también asumió que era el peaje que debía pagar por hacer realidad uno de los sueños de su vida y al mismo tiempo responder a la llamada del golf español para el Open de España. No quería fallar a ninguno de los dos. Un esfuerzo generoso de un jugador cuyo compromiso con el deporte y su país es innegociable, como ha demostrado representando a España siempre que ha podido en la Copa del Mundo o los Juegos Olímpicos.
Rafa llega al Open de España en la cresta de la ola
Y es que Rafa no aterrizó hasta ayer por la noche en Madrid porque estaba en California. “Ha sido la mejor experiencia de mi vida, algo inolvidable”. Visitó el Surf Ranch de Kelly Slater, unas instalaciones de ensueño para cualquier amante al golf. Una virguería de la tecnología que produce la ola perfecta. “Nueve de cada diez olas es perfecta, una pasada, increíble. He aprendido y he disfrutado más en un día y medio que en los dos últimos años. En el mar, en un día cualquiera que vas a coger olas, lo normal es estar siete segundos de media encima de una ola y coger unas cuarenta… Eso significa que en un día bueno puedes estar sobre una ola algo así como dos minutos y medio por día y dentro de un tubo… pues igual ni lo consigues. Y en esta instalación podías estar 40 segundos sobre una ola y tenías la opción de estar mucho tiempo en el tubo, si lo haces bien claro, que no es fácil”, explicaba el canario a Tengolf con los ojos abiertos al máximo de la emoción.
Cabrera Bello aterrizará en Madrid horas antes de salir a jugar
Rafa habría preferido preparar el Open de España de otra manera, pero no ha sido posible. La cita con Kelly Slater y Adam Scott estaba fijada desde hace cinco meses, y no son precisamente agendas fáciles de conciliar. La celebración del Open de España no se hizo oficial hasta hace poco más de un mes. Si hubiera sido cualquier otro torneo, no hay ninguna duda de que no habría jugado, pero Rafa siempre ha tenido que claro que estará en el Open de España cada vez que pueda, aunque sea a costa de pagar un peaje importante por hacer realidad, eso sí, uno de los sueños de su vida.
Sea como fuere, Rafa está dentro de la pelea. Ha jugado mejor de lo que dice el resultado, pero no ha sido fácil acostumbrarse a los greenes del Centro Nacional de Golf viniendo de Augusta. Ha tenido muchas opciones de birdie y su juego largo ha estado más que aseado. Que nadie dude de que este viernes tratará de hacer una vuelta baja para meterse en el fin de semana. “Se pueden hacer pocas y yo estoy jugando muy bien, así que no descarto nada. Desde luego lo voy a intentar”, asegura.
