Nick Watney (-16) se ha llevado el WGC Cadillac de Doral, doblegando finalmente a Dustin Johnson (-14) con un birdie final en el hoyo 18 muy significativo…
no sólo no le tembló el pulso con el torneo en juego, sino que dejaba sin opciones a su máximo rival con un birdie en el hoyo más complicado del campo. Son detalles que nos sitúan ante un jugador que crece y crece.
Su triunfo será muy celebrado. Watney es algo así como el yerno de América. ¿Qué madre estadounidense no lo querría en la familia? A ese perfil de espléndido y responsable muchacho va confirmando una categoría indiscutible de 'killer' en el campo. Este año no se ha bajado del top ten en todas y cada una de sus apariciones. Cosa seria.
Watney es, sin duda, un gran pegador. Golf moderno puro y duro. Pero no deja de parecernos también un fino estilista. Sutil. Con manos de seda.
Todavía guardamos en la memoria el disgusto de este californiano de 29 años cuando el destino se burlaba de Dustin Johnson, buen amigo suyo, en el pasado PGA. Aquel domingo jugaron juntos en Whistling Straits y él acababa de firmar un 81 horripilante, cuando había salido con todas las opciones de victoria. Hoy, Nick iba por delante metiéndole presión. Su 67 final, basado entre otras cosas, en una soberbia demostración con el putter, le ha servido para apuntarse el triunfo más importante de su carrera.
Y no va a ser el último, seguro. No son casualidad los dos séptimos puestos cosechados por este jugador el año pasado en el Masters y en el British. Es jugador de probados recursos y en escenarios muy diferentes. Está llamado al protagonismo en las grandes citas. Hace dos años, sin ir más lejos, ya le había discutido a Mickelson en el mismo Blue Monster el triunfo hasta el último hoyo.
En un 2011 que no dejaba de 'homenajear' al golf europeo, Watney vuelve a recordarnos que la calidad de la Armada de las barras y estrellas está fuera de toda duda. Por cantidad y, sobre todo, por calidad. Al final, los mejores representantes de la Vieja Europa este domingo han sido Francesco Molinari (-13) y un siempre sorprendente Anders Hansen (-13), que ha venido fuerte desde atrás. Donald (-11) estuvo ahí sólo durante los primeros nueve.
La jornada final nos ha dejado también al mejor Tiger Woods (-8), que al final se las ha arreglado para meterse en el top-ten (10º) después de entregar el mejor resultado del día (66 golpes). Hoy sí ha metido algunos putts importantes. También se le ha visto un juego mucho más ordenado alrededor de los greenes. Sólo puede ir a mejor. Esa es la sensación final que queda. La efusiva felicitación de su caddie, Steve Williams, en el 18 era un fiel reflejo del agobio que ha llegado a sentir este gran campeón durante la semana…
Los españoles, Miguel Ángel Jiménez (+4) y Álvaro Quirós (+8), completaban su actuación en el Cadillac con vueltas de 76 y 75 golpes, respectivamente, puestos 55º y 64º.
