Inicio Grandes Circuitos DP World Tour Hambre (y sed) de aprender

Hambre (y sed) de aprender

Compartir

Ahí estaba Adrián Otaegui siguiendo ayer el partido de los líderes.

El jugador vasco destaca ya, desde jovencito (tiene 21 años), por ser uno de los que más tiempo pasa en el campo de prácticas, pero se ve que complementa las sesiones de entrenamiento con otras lecciones no menos didácticas…

Lo que sea con tal de avanzar. Otaegui, que se quedó fuera del corte por un solo golpe, salió desde el tee del 1 por detrás de las cuerdas siguiendo a Cañizares, Cabrera Bello y Seve Benson y completó los primeros nueve hoyos del campo. No es nada habitual ver a un profesional siguiendo a otro, para qué nos vamos a engañar, pero este chaval respira golf por cada uno de sus poros…

– ¿Qué creen que le ocurrió ayer sábado a Jorge Campillo en el hoyo 10? Exacto. Se le volvió a quedar un segundo golpe niquelado para el hierro 3, que por supuesto tampoco llevaba en la bolsa. De nuevo volvió a pegar el híbrido y de nuevo volvió a irse al agua… El viernes tenía 214 yardas por delante con viento ligeramente en contra; el sábado eran 210 yardas y el viento soplando del mismo modo. Es una lástima, porque el extremeño marcha -6 y este es el hoyo más sencillo del campo.

-Seve Benson lleva una inscipción en su sand wedge. Pone sencillamente: ‘creme de la creme’. A juzgar por su finura en algunas recuperaciones, no es ninguna exageración. El inglés está trabajando muy duro el juego corto desde hace tiempo. Y se nota.

– La tercera vuelta de Nacho Elvira en el Palais Royal fue como para enmarcar y exponerla como especimen raro. El cántabro cogió casi todas las calles, pero sólo la mitad de los greenes. Y aún así, habiendo cazado sólo nueve greenes, hizo siete birdies en un campo donde las recuperaciones son carísimas. Bajaba Elvira desde el tee del hoyo 12 maldiciendo su suerte (acababa de irse al agua), realmente enfadado… Pero salvaba un gran bogey y acto seguido encadenaba cinco birdies. Eso, eso, la rabia hay que echarla fuera…

– La línea entre la suerte y la mala suerte es muy delgada. Mucho más en este deporte. Venía ayer Cabrera Bello controlando su vuelta y agazapado, aguardando su oportunidad. Había fallado algunos tiros, pero resolvía los problemas con aplomo. Y hasta había pegado buenos tiros para dejarse alguna opción de birdie (hoyo 4, sobre todo). Así hasta llegar al hoyo 6 con un parcial de PAR en el día. Allí, su drive corrió más de la cuenta y en la dirección indebida y fue a quedarse en la situación que bien puede apreciarse en la imagen, al pie de un árbol, injugable. A partir de ahí, realmente, y aunque hizo un buen birdie en el 8, comenzó a torcerse su vuelta…

– Confirmado: a José Manuel Lara le está costando un mundo calentar motores. Su acumulado total en el primer tercio de cada una de sus tres vueltas es de +8. Comenzara por el tee que comenzara, tropezaba. Después, siempre, le ha dado la vuelta a la tortilla…

– Robert Jan Derksen (-10) reconocía ayer que una de las claves de su buena actuación esta semana en Agadir tiene que ver con que la semana pasada estuvo practicando en Valderrama. Ciertamente, ambos campos pueden tener algún parecido, más que nada en el concepto del golf que debe jugarse y en el tamaño de algunos greenes, muy pequeños.