El danés J. B. Hansen (-19) y el italiano Francesco Laporta (-19) son los colíderes del AVIV Dubai Championship una vez terminada la tercera jornada, con un golpe de ventaja sobre el defensor del título, Antoine Rozner (-18), que hoy ha dado un respiro a todo el mundo y ‘sólo’ ha sido capaz de firmar un 69… Un registro que se antoja corto para el galo si tenemos en cuenta los antecedentes (hasta hoy, su media de golpes en el Fire course del Jumeirah Golf Estates era casi de siete menos en seis rondas de competición) y que, además, había comenzado hoy con un parcial de tres menos en tres hoyos tras embocar para eagle desde la calle en el hoyo 3…
En fin, Rozner todavía tiene la opción mañana de hacer historia para el golf francés, consiguiendo su tercera victoria en el circuito europeo en sólo 45 torneos disputados, reventando así la anterior marca en poder de Thomas Levet, que necesitó más de cien torneos.
Mientras tanto, hay otros muchos alicientes para la jornada dominical. Por ejemplo, a Hansen, uno de los colíderes, quizá sólo le valga el triunfo para meterse en la Final de Dubai de la próxima semana. Además, Min Woo Lee (-16) se ha procurado una opción de victoria, en cuyo caso sus opciones de ganar la Race to Dubai crecerían sensiblemente, aunque hay que matizar: de cualquiera de las maneras necesitaría también el triunfo en la Final, pero de este modo exigiría más a los grandes candidatos, Morikawa y Horschel, que en el caso del doble triunfo del joven australiano deberían alcanzar el top 5 en la Final para desbaratar su carambola cósmica.
Resulta también de lo más aleccionador y sorprendente el esfuerzo de un veterano como Padraig Harrington (-14), con sus 50 años ya a cuestas, que todavía se ha procurado una posibilidad de meterse en la Final de Dubai cinco años después de clasificarse por última vez (2016). El irlandés ha firmado hoy un 67 para alcanzar la décima posición y podría valerle un séptimo o incluso un octavo puesto para lograr tal objetivo, precisamente en el año que ha ejercido como capitán de la Ryder. Tal meta llevaría, sin duda, el sello de los grandes campeones, que nunca pierden la esperanza de llegar un poco más lejos, de agrandar siquiera una página su leyenda. Harrington se ha hartado de fallar cortes en el presente ejercicio, como no podía ser de otra manera, pero un sexto puesto en Dubai a principios de año y un increíble cuarto puesto en un Grande, el PGA, unidos a una buena actuación la pasada semana en Portugal, le han permitido situarse en esta posición.
No habrá españoles en la lucha por ningún objetivo interesante, puesto que Jorge Campillo (-5) hoy descarrilaba con un registro de 76 golpes, en una semana y un campo en el que incluso jugando dos o tres por debajo del par puedes perder posiciones. Alejandro Cañizares (-11) ha estado brillante (vuelta de 66 golpes), pero venía desde muy atrás y la pelea por el triunfo (con el que además se metería en la Final de Dubai) se antoja demasiado lejos, partiendo a ocho golpes de los líderes. Tampoco Nacho Elvira (-10) parece optar a las primeras plazas, ni Álvaro Quirós (-8) va a poder pelear por ese tercer puesto en solitario que le garantizaría los derechos completos de juego para 2022. El peliagudo caso de Sebas García Rodríguez, que falló el corte pero sigue luchando por la ‘permanencia’, merece análisis y comentario aparte.
