Miguel Ángel Jiménez no estaba nada contento con la manera de afrontar este inicio de año 2016. Así ha quedado bien recogido y explicado en unas declaraciones publicadas por la Federación Andaluza de Golf. La clasificación para los Juegos Olímpicos de Río, por la cual había modificado parcialmente su calendario para competir más en el European Tour y así puntuar, se había convertido en un problema más que en un acicate.
El jugador malagueño se ha dado cuenta de que eso de salir a jugar pensando en algo que iba a ocurrir dentro de unos cuantos meses sólo le ha traído dolores de cabeza al restarle naturalidad y, de alguna manera, distraerlo del objetivo concreto, que no es otro que el día a día y el hoyo a hoyo.
Así que ha viajado a tierras de Tailandia con otra mentalidad para la disputa del True Thailand Classic en el Black Mountain Golf Club (Hua Hin, Tailandia), que es a juicio de muchos expertos el mejor campo de aquel país. Miguel ha borrado completamente de su cabeza el objetivo de los Juegos Olímpicos, con la idea de recuperar frescura mental y no andar tan pendiente del resultado. Coincide este radical cambio de enfoque con que además este campo le gusta y trae buenos recuerdos, pues el año pasado llegaba a salir en el partido estelar del domingo (finalmente aquella ronda no fue demasiado bien y terminó en séptima posición, a tres golpes del ganador, Andrew Dodt, que este año defiende título).
Nacho Elvira, Jorge Campillo, Javier Colomo, Alejandro Cañizares, Carlos Pigem, Pablo Larrazábal, Borja Virto y Eduardo de la Riva completan el cuadro de nueve jugadores que presenta la Armada esta semana. Hay que reseñar que Pigem obtuvo aquí hace doce meses su único top-ten en un torneo del circuito europeo, y que a Colomo tampoco le fue nada mal (15º).
