El final de la primera jornada en Gleneagles nos ha dejado a Brett Rumford (-5) y Knut Borsheim (-5) como líderes más o menos sorprendentes…
si es que el golf y la calidad demostrada de todos los profesionales pueden llegar a sorprendernos a estas alturas.
El australiano, Rumford, es casi un ‘viejo rockero’ que de vez en cuando destapa el tarro de las esencias y que, de hecho, atesora ya tres triunfos en el circuito europeo, aunque el último date de 2007. El joven noruego, Borsheim (25), apuntaba grandes maneras tras su paso por el golf universitario americano. También causaron ‘furor’ aquellos dos hoyos en uno que se marcó en la Final de la Escuela… En realidad hay seguir esperándolo porque nunca es sencilla la primera temporada en el circuito. Este joven novato nórdico apenas estaba asomando en 2012, pero nunca es tarde y ahí lo tenemos: hoy sólo tres jugadores han terminado sin bogeys en un complejo Gleneagles, y y él ha sido uno de ellos (Dubuisson y Ramsay, los otros dos).
No quedaba ningún jugador español con posibilidad matemática de meter el cuello en el equipo de la Ryder. Sin embargo, y a la espera de lo que ocurra este domingo en Gleneagles y también en Nueva York (Harrington quiere luchar hasta el final…), todavía se podía uno agarrar a las lejanas opciones de Cabrera Bello y Miguel Ángel Jiménez de entrar en las quinielas de Olazábal siempre y cuando ganasen en tierras escocesas, poco más o menos. Pues bien, el arranque en este sentido no ha sido el mejor…
Cabrera Bello (PAR) comenzaba como una bala con dos birdies, pero luego no ha estado fino con el juego corto y ha pagado muy caros sus escasos errores. No obstante, su registro no es ninguna tragedia porque los líderes no están tan lejos. Peor lo tiene Jiménez (+4), irregular de tee a green y nada resolutivo tampoco con el putter.
Ningún jugador de la Armada ha ganado al campo tampoco en el turno de tarde: Cañizares (+1), Campillo (+1), Larrazábal (+3), Otaegui (+5) y Olazábal (+6). El capitán ha cogido sólo cinco calles y nueve greenes y así sólo se camina cuesta arriba… Mañana el corte debe situarse por encima del par (en torno al +2 si se mantienen las mismas condiciones de juego), así que cada uno puede ir haciendo números.
Colsaerts da un pasito más hacia Chicago
