Hace casi once años Mike Lorenzo Vera ganaba la final del Challenge Tour, que entonces se jugaba en Apulia San Domenico… Y hasta ahí llega el currículo victorioso del experimentado jugador francés, que esta semana se ha trabajado una magnífica oportunidad de obtener su primer triunfo en el circuito europeo.
Lorenzo Vera (-15) es el líder en solitario del Rocco Forte Open después de la tercera jornada y tras firmar un 63, que a su vez seguía al 64 del viernes; un total de 16 birdies en las dos últimas rondas, con un solo bogey, que le han dado una ventaja de dos golpes sobre los inmediatos perseguidores, su compatriota Julien Guerrier (-13) y el sueco Joakim Lagergren (-13), que también entregaba un 63. Hoy casi no ha soplado el viento sobre el Verdura Golf Club (Agrigento, Sicilia) y los marcadores se disparaban, aunque muy pocos con la efectividad letal de Lorenzo Vera…
Sirva una vez más el ejemplo para dar aún más valor a las victorias en el circuito europeo, que no se regalan. Lorenzo Vera, que llegó joven a la máxima competición continental y luego anduvo unos cuantos años desaparecido de la misma, lleva media vida tratando de romper al fin el maleficio. Veremos si esta vez es la buena.
Pep Anglés (-5) no va a luchar por el triunfo en tierras sicilianas, salvo sorpresa mayúscula, pero hoy se ha sacado varias espinas, cerrando una gran vuelta de 66 golpes, muy sólida y consistente, que lo ha dejado a las puertas del top-ten del torneo y, por tanto, con opciones de rematar una excelente semana que pueda ser el ‘despertador’ de la temporada. El catalán, con unas capacidades mayúsculas, necesita todavía encontrar su sitio en el European Tour, hacerlo suyo, sentirse importante y competitivo, digamos que vuelta tras vuelta. Es casi una cuestión de confianza y autoestima deportiva y en este sentido rondas como la de hoy pueden ayudar mucho.
También hay que destacar el 68 de Emilio Cuartero (-3), que está aprovechando al máximo la invitación y se está defendiendo sin problemas en la primera división, quizá demostrándose a sí mismo que todo puede llegar, mucho más si tenemos en cuenta su juventud (tiene 27 años). Hoy volvía a completar una ronda muy equilibrada, bien salpicada de birdies, y tan solo registra un bogey en las dos últimas jornadas. Scott Fernández (-1), por su parte, ha ido perdiendo gas. Hoy, de todos modos, terminaba bien la vuelta después de comenzar con un doble bogey y de cerrar un primer tercio de ronda muy negativo.
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