Adrian Meronk (-16) ha ganado el Estrella Damm Andalucía Masters y de paso ha unido su nombre para siempre al Real Club de Golf Sotogrande, que se estrenaba como sede de un torneo del circuito europeo. No hacen mala pareja. El polaco fue el gran ‘ausente’ en la Ryder de Roma, según el parecer de muchos de sus compañeros, testigos de su potente progresión, confirmada hoy en un dato rotundo, pues acaba de sumar su cuarto triunfo en el DP World Tour en apenas quince meses. En cuanto a Sotogrande, a pesar de haber sufrido una meteorología inclemente en tres de las cuatro jornadas, también se ha revelado como un escenario sobresaliente que puede dar mucho juego, espectáculo y brillantez en próximas ediciones, siempre y cuando se confirme que seguirá acogiendo el torneo (de momento, así será en 2024; y después habrá que ir viendo).
Seguro que Meronk regresará para defender su título dentro de doce meses, aunque se haya convertido ya en un jugador del PGA Tour a todos los efectos. No le hacía falta este triunfo para obtener una de las diez tarjetas del circuito estadounidense que se reparten este año en el DP World Tour, pero aquí está, por si acaso, la demostración de que este jugador no será un mero adorno más o menos exótico al otro lado del charco.
El polaco arrancaba hoy con dos bogeys tempraneros que prácticamente lo sacaban de la ecuación ganadora, pero si algo caracteriza a este jugador es una capacidad explosiva de hacer resultado. Tan explosiva, que hasta es capaz de embocar desde 110 metros para sumar un segundo eagle en su tarjeta, tal y como hacía en el hoyo 9… Un parcial de ocho menos por los últimos trece hoyos, con dos eagles incluidos, le valía para cantar victoria, con una tarjeta final de 66 golpes, un excelente registro, el mejor del día, bajo unas condiciones de juego algo más que complicadas por culpa del agua y el viento.
El polaco se imponía al final a Matti Schmid (-15), el joven alemán que también ha dado un paso de gigante en su carrera, puesto que su segundo puesto en solitario le garantiza los derechos de juego en el DP World Tour para 2024. Como ha quedado explicado esta misma semana, Schmid tiene la sana intención de compaginar los dos circuitos más importantes del mundo, europeo y estadounidense, aunque ahora todavía tiene que asegurarse una plaza en el PGA Tour para el año que viene. Se trata, desde luego, de otro gran proyecto de jugador europeo, todavía con margen de mejora. De hecho, hay que reconocer que Schmid ha tenido en su mano el triunfo, pues erraba un putt de par de metro y medio en el hoyo 16, a la postre decisivo, además de dejarse hoy mismo por el camino otras buenas opciones, como el putt de eagle de unos dos metros que se le escapaba en el 14. Tiempo habrá de sobra de ver a esta grandiosa fuerza de la naturaleza imponiendo su ley.
Las dos opciones de triunfo del golf español quedaban pronto cercenadas. Adri Arnaus (-8), que ya partía a cinco golpes de la cabeza, arrancaba con un triple bogey asesino en el hoyo 1 tras mandar la bola fuera de límites desde el tee. En cuanto a Adrián Otaegui (-10), que salía en el partido estelar, no ha tenido su día, sobre todo en los greenes, de tal manera que cubría la primera mitad del recorrido sanroqueño con un parcial de dos arriba que lo dejaba demasiado lejos.
