– Miguel Ángel Jiménez nunca se cansará de batir o igualar récords. Tampoco de dejar con la boca abierta a crédulos e incrédulos. Este viernes ha conseguido su noveno hoyo en uno en un torneo del circuito europeo, igualando la marca de Colin Montgomerie. Pegaba un hierro 6 delicioso en el hoyo 8 y la bola picaba cinco metros por delante de la bandera, yendo a morir suavemente a la cazoleta. Los bailes con los que el malagueño celebra últimamente este tipo de acontecimientos terminarán siendo legendarios… El premio por la gesta venía con espuma: 288 tercios de cerveza Mahou. Mucho más allá del hoyo en uno en sí mismo, hay que considerar la capacidad que tiene este hombre por momentos de hacer fácil lo imposible.
– Mario Galiano (+5) ha luchado como un jabato por pasar el corte y ser el único amateur en el campo durante el fin de semana. Y hasta el final ha tenido la opción después de sacar un gran birdie en el 7. Necesitaba salvar el par en el 9, por donde finalizaba su recorrido, pero erraba el putt decisivo desde unos dos metros. Un putt bien tirado, en todo caso, con decisión. Pero la bola sólo se dignó a lamer buena parte del borde del hoyo… El andaluz, en todo caso, ha saldado con buena nota su participación en un campo realmente complicado.
– Nacho Garrido estaba realmente satisfecho después de comprobar que, en efecto, su +3 estaba dentro del corte. Hay que pensar que el madrileño viene de un largo periodo de inactividad y todavia le falta ritmo de competición.
– Carlos del Moral (+1) se ha dado un respiro y ha demostrado que tiene agallas. El jueves se marchaba destrozado por culpa de tres bogeys consecutivos al final de su vuelta que afearon demasiado una trabajadísima jornada de golf. Hoy viernes ha respondido con andanadas de birdies a los tropiezos, jugando en el peor turno. El valenciano perdió hace poco a su padre y, evidentemente, no pasa por su mejor momento, así que bien puede darse el gusto de dedicarle con orgullo esta vuelta de 73 golpes tan bien peleada.
– Victor Dubuisson se ha quedado fuera del corte con una segunda vuelta de 77 golpes. Concluye así su extraña aventura por el Open de España, primero apuntado, después borrado y a última hora inscrito de nuevo por una invitación. No ha sido el Open de España de Dubuisson, eso está claro. Hoy jugaba muy mermado por culpa de un fuerte brote alérgico que incluso puso en duda su participación.
