Las fatigas y dolores de cabeza no acabaron el domingo en Shinnecock Hills. Quien pensara que el Golf Gut Laerchenhoff de Colonia iba a ser algo así como una praderita entrañable estaba muy equivocado. La primera jornada del BMW International Open ha puesto de manifiesto que para gana derrotar al campo habrá que ponerse el mono de trabajo y andar fino alrededor de green. Muy fino.
Campillo ya está en el British y Otaegui lo tiene a tiro
El liderato, una vez concluida la jornada matutina, se ha quedado en tres bajo par, y lo comparten Aaron Rai y Henric Sturehed, el sueco que se dio a conocer en el pasado Open de España del Centro Nacional. Ellos dos son los únicos que han podido bajar de 70 golpes en la primera jornada y nadie ha podido entregar una tarjeta sin bogeys,
Este dato no es más que un fiel reflejo de las duras condiciones del campo alemán. Pero aquí van más:
– Se han hecho más bogeys (151) que birdies (142)
– Se han hecho cassi seis veces más dobles bogeys o peor que Eagles
– Sólo cuatro hoyos se están jugando de media por debajo del par
No, desde luego que no es Shinnecock Hills, ni se puede calificar de escabechina la primera jornada, pero lo cierto es que se trata de un trazado duro y muy exigente. De hecho, el European Tour daba a conocer ayer que el Golf Gut Laerchenhoff había sido el cuarto recorrido donde más difícil fue recuperar en 2016. De perita en dulce, nada.
OFICIAL: Jorge y Adrián jugarán el PGA Championship
Entre los españoles, quien mejor se ha adaptado a estas condiciones ha sido Nacho Elvira (-1), un golfista con un juego corto especial. Su vuelta ha sido una montaña rusa. Sólo ha firmado nueve pares frente a cuatro birdies, un eagle, tres bogeys y un doble bogey. Un buen arranque del cántabro, situado provisionalmente entre los diez primeros.
No andan lejos Sergio García (+1) y Gonzalo Fernández Castaño (+1). Sergio no termina de despegar. Hizo cuatro birdies y tres bogeys, sin terminar de encadenar en ningún momento una racha poderosa de juego.
Más atrás comenzaron Scott Fernández (+3), Pedro Oriol (+6) y Alejandro Cañizares (+7). Todos ellos deberán remar el viernes para pasar el corte, en especial los dos últimos, que necesitarán una vuelta realmente baja. Sea como fuere, en el caso de Cañi el sólo hecho de que esté jugando ya es una noticia positiva tras la lesión de muñeca que lo ha mantenido parado desde hace dos meses.
Una plaza ’10’ para verse otra vez con las musas
En cuanto a la clasificación para el Open Championship, dos de los rivales directos de Adrián Otaegui, Mikko Korhonen (-1), Andy Sullivan (-1) y Wade Ormsby (-1) han empezado muy bien. El golfista español sale en el turno de tarde.
