El poder galés desplegado en este Madrid Masters no se ha achantado ante el empuje sublime de Luke Donald (-12), aunque el inglés cierra el día como líder…
El capitán del equipo europeo de la Ryder, Colin Montgomerie, quiso jugar junto a Rhys Davies en el pasado Open de Italia el jueves y el viernes para ver de qué pasta estaba hecho el joven galés… Y lo cierto es que Davies no pasó la prueba, quedándose fuera del corte. Pero este chico no va a tirar la toalla así como así. Quiere meterse en el equipo en la edición que se disputa en su país y aquí, en la Real Sociedad Hípica, ha vuelto a la carga.
Sólo un bogey postrero en el 17 le ha impedido igualar en el liderato. Pero ahí está, en -11, tras entregar un sólido 68, como regalo especial que él mismo se ha hecho en el día de su 25 cumpleaños.
La Armada ha estirado el cuello por la tarde, echándole ese pico de sal que tan bien le viene al Madrid Masters. Y el caso es que después del pequeño seísmo matutino que nos dejaba sin Sergio y Miguel, entre otros, el fin de semana, también caía por la tarde el mejor de los nuestros el jueves, Álvaro Velasco (+1), que rápidamente anotaba en su tarjeta sendos doble y triple bogey. Afortunadamente las buenas noticias fueron brotando aquí y allá…
Ignacio Garrido (-6) es ahora nuestro ‘capitán’. Y eso que esta semana le venía algo atravesada… «No puedo decir que sea mi mejor semana en el aspecto mental, no estaba muy centrado, pero poco a poco voy cogiendo onda», explicaba. El madrileño se ha ido calentando, hasta llegar a un ‘clímax’ más que interesante en el hoyo 15, donde embocaba desde la calle después de pegar un driver justito… «Venía jugando ya bastante bien y ese eagle la verdad es que te da un subidón de moral. Lo cierto es que he pegado un driver malo a la izquierda de la calle, y luego un hierro 7 que ha salido fantástico, aunque ya se sabe que para que entre el factor suerte siempre influye».
«Ahora estamos en la pelea y haciendo una buena vuelta mañana puede haber opciones. Estar a 5 ó 6 golpes no es nada a falta de dos jornadas», concluía.
Álvaro Quirós (-5) se ha metido por momentos en los últimos partidos del sábado (venía con cuatro menos en el día por el hoyo 11, y eso que había tripateado en el par 5 del 9 estando de dos en green…). Sin embargo después se ha atrancado un poco. «Estaba jugando muy bien pero no metía ninguna y al final casi me he dejado llevar, como si se hubiera acabado ya el día a falta de cinco hoyos. Me he desesperado y he tirado la toalla, ¡así soy yo!». Éste era el análisis del jugador en caliente… La realidad es que en esos cinco últimos hoyos se ha agarrado bien al campo, realizando un par de recuperaciones de notable valor (la del par 3 del hoyo 17, casi desde el bosquecillo de la derecha, especialmente) y fabricando alguna opción más de birdie.
En el mismo partido, Gonzalo Fernández Castaño (-2) protagonizaba la remontada del día, tan deseada por los centenares de aficionados que lo escoltaban. Estará el fin de semana de ‘su’ torneo. «Habría sido duro ver los toros desde la barrera aquí. He luchado mucho el día y creo que he merecido el resultado. Tengo que agradecerles a Quirós y a Molinari todo lo que me animaron ayer, cuando peor iba, y lo cierto es que yendo +6, después he hecho un -8 en 25 hoyos», explicaba.
El corte del torneo se ha situado finalmente en -1, aunque de manera realmente apretada, ya que ese resultado ha sido el puesto 64. Han entrado 77 jugadores.
