Una vez más, y ya en la distancia, hay que volver a aplaudir la decisión de Colin Montgomerie de incluir a Luke Donald entre sus elecciones para el equipo de la Ryder…
Este inglés, que aspira tranquilamente a terminar el año entre los cinco o seis primeros del mundo, nunca hace ruido. Parece que no está y sus prestaciones son alucinantes. El HSBC vuelve a ser un claro ejemplo: no contamos con él para el triunfo, pero él se ríe de todos nosotros con un juego que es un prodigio de ritmo y serenidad, instalado en un destacadísimo segundo plano.
-¿Se le ocurre a alguien alguna explicación al flojo rendimiento de los jugadores norteamericanos en este World Golf Championship? El caso es que ni siquiera Tiger ha escapado esta vez al implacable filtro de la realización televisiva: ya saben, el que no está arriba en la clasificación deja de salir paulatinamente salvo que se llame Tiger Woods. Lo dicho, esta vez ni él se ha salvado y seguramente ha sido la retransmisión con menos minutos de Tiger que se recuerda en mucho tiempo.
– El dropaje de Ernie Els en el hoyo 16 todavía nos tiene algo mosqueados… El sudafricano se fue al agua en este par 4 corto tratando de llegar a green desde el tee, y su bola, nos parece, botó por dentro de la zona delimitada por la línea roja. Pero un árbitro le permitió dropar hacia el green, como si hubiese botado fuera antes de entrar en el obstáculo.
-Ese putt de Pablo de un metro en el hoyo 14 para birdie… Volvemos a recordarlo delante de un espejo y se nos vuelve a quedar cara de idiota. Corbatón de 360 grados. Demencial. Sobre todo porque el malagueño ha rondado hoy una vuelta de órdago y ese momento de su jornada ha podido ser determinante. En cualquier caso, sus hechuras en este torneo son de jugador grande.
-Viendo el segundo 80 consecutivo que ha entregado Oosthuizen valoramos aún más el esfuerzo de Álvaro Quirós por mejorar su posición. Lo fácil era dejarse llevar.
-Cinco minutos de locura: Harrington embocaba un albatros en el hoyo 14 y acto seguido Francesco Molinari la metía desde la calle en el hoyo 13 pegando un hierro 7. El irlandés es capaz de hacer un birdie desde el vestuario de jugadores con tal de arreglar una vuelta. Lo del italiano, sinceramente, nos sorprende menos, en vista de su precisión con los hierros.
-Matteo Manassero también es humano. Viendo su aplomo y seguridad en la grandes citas teníamos nuestras dudas. Hoy ha hecho 81 golpes, la peor tarjeta del día. Bienvenido al mundo de los mortales 'Bambino'.
