La Armada ha defendido con coraje sus posiciones en el BMW de Colonia, hasta el punto que Pablo Larrazábal (-17) partirá mañana como líder en solitario y destacado, con tres golpes de ventaja sobre un pelotón de ocho jugadores (¡ocho!) que vienen con -14, y con cuatro golpes sobre otro pelotón de nueve jugadores más (¡nueve!) que arrancarán en la jornada decisiva con -13.
En el primer pelotón, el de los -14, se encuentran Carlos del Moral y Rafael Cabrera Bello, que también van a poder defender con uñas y dientes sus opciones de triunfo. El embotellamiento arriba, quebrado únicamente por Larrazábal y su 67 en tercera ronda, es bestial. Existe una explicación. Otra cosa es que resulte lógica…
El Golf Club Gut Lärchenhof se ha mostrado hoy especialmente generoso. Así, llegaban pronto los primeros pelotazos a la casa club: Paul Casey (-13)entregaba un 63 y se encaramaba a la cima de la tabla después de pasar raspado el corte ( se metió el viernes con un birdie postrero en el 18); después llegaría el 62 de Richard Geeen (-14), los 65 de Oliver Fisher (-13), Donaldson (-13) y Molinari (-14), y el 66 de Del Moral (-14), Bjorn (-14) y Stenson (14)… Sin embargo, después de la suspensión de una hora y media larga por tormenta eléctrica, y mientras los partidos de delante seguían haciendo birdies, los últimos se la veían y deseaban para encontrar trapos y cazoletas. El dato: en una jornada en la que casi un cuarenta por ciento del field (26 de 69) entregaba tarjetas de 68 golpes o mejor, nos encontrábamos ante un curioso fenómeno, ya que en los últimos siete partidos (¡siete!), o lo que es lo mismo, entre los últimos catorce jugadores en juego, los mejores hasta el momento, sólo se registraba una tarjeta por debajo de 69 golpes. La de Larrazábal (67). Curioso.
El caso es que el barcelonés se encuentra en gran disposición de obtener el primer doblete ganador de su carrera en el circuito europeo, tras su victoria en Abu Dhabi de principios de temporada. Se lo ha ganado a pulso con esos 54 hoyos consecutivos sin firmar un bogey. Ni uno en toda la semana. Y después de haber sacado adelante las siete recuperaciones a las que se ha enfrentado en estas tres jornadas. En efecto, porque Pablo ha cazado la friolera de 47 greenes. Hoy, quizá, no conseguía dejarlas todo lo cerca de la bandera que le hubiera gustado, pero al fin y a la postre tanta insistencia y solidez encontraban su premio, con un parcial eléctrico de cuatro menos en los últimos seis hoyos.
Las opciones del golf español vuelven a estar ahí, limpias y claras. Puestos a soñar, estaríamos hablando mañana de la sexta victoria de la Armada en la presente temporada, recién pasado el meridiano de la misma. Números de Matrícula.
Carlos del Moral se ha ganado ese derecho a soñar. El valenciano asaltaba la banca con dos eagles en el último tercio de la vuelta (hoyos 13, par 5, y 17, el par 4 al que hoy se podía llegar de uno a green pegando un tirazo). Mientras, Cabrera Bello salvaba por detrás una jornada exasperante en el partido estelar. El canario cazaba todos los greenes y sin embargo terminaba con tres bogeys (tres tripateos y 34 putts)… Pero en el último esfuerzo aún metía la cabeza entre la multitud de candidatos con dos birdies en los hoyos 17 y 18. Una vez más, Rafa en la pomada…
Mucha atención con los horarios el domingo. Los jugadores saldrán de tres en tres y se adelantan las salidas porque se espera tormenta. Así, Pablo Larrazábal saldrá a las 08.50. En principio, poco antes de las dos de la tarde debería estar finiquitado el torneo.
