En una tercera jornada del Abierto de Italia en la que tres jugadores españoles partían con serias opciones de ganarse un puesto en los últimos partidos del domingo, nos hemos quedado con un torneo que mañana bien podría decidirse entre dos franceses y un polaco. Julien Guerrier (-12) es el líder en solitario, seguido por Romain Langasque (-11), que hoy entregaba un 62 soberbio, y Adrian Meronk (-11), que sigue acumulando méritos para meterse en el equipo europeo de la Ryder, lo que sin duda sería uno de los noticiones de la temporada.
El golf galo, por si acaso, ha guardado dos balas más en la recámara, con otros dos jugadores dentro del top ten, Pavon (-8) y Sordet (-6). La Armada española, sin embargo, que nos tiene muy mal acostumbrados en 2023, se ha quedado prácticamente fuera de juego. Adrián Otaegui (-2), que salía en el partido estelar, firmaba un 76 después de pasar un día exasperante en la oficina. Buenos tiros que no terminaban de la mejor manera, putts cortos que no entraban (y mucho menos los largos), así hasta el punto de sumar hasta seis bogeys en un tramo de diez hoyos, los que van del 4 al 13 del Marco Simone Golf Club romano, una situación inusual en la carrera del jugador vasco, tan pulcro normalmente en los greenes y alrededores.
Rafa Cabrera Bello (-1), por su parte, firmaba el primer par del día en el hoyo 10, llegando hasta ese punto con seis bogeys y tres birdies en las alforjas. La fiabilidad desde el tee mostrada el viernes se había transformado en incertidumbre y sólo en esos primeros nueve hoyos del día acumulaba más bogeys que en los 36 anteriores. Jorge Campillo (-5), por su parte, sí que ha conseguido ganarle al campo, pero lo ha hecho por la mínima (tarjeta de 70 golpes) y hoy han sido muchos los jugadores que han entregado buenos registros (algunos tees adelantados han aydado lo suyo al respecto), de tal manera que sus opciones de victoria también han quedado prácticamente aniquiladas. Sus posibilidades pasarían por ese 62 de hoy de Langasque o aquel 63 de Pavon del jueves, y quizá ni por esas. Por si acaso, y dado que el extremeño pasa por un extraordinario momento, dejemos abierta la posibilidad…
Dos buenas noticias: el 69 de Santi Tarrio (-3) y el 68 de Alejandro Del Rey (-1), aunque ambos venían desde muy atrás y tampoco entran en la ecuación decisiva del domingo.
