La rabia por el último putt fallado en el green del hoyo 18 le duró el tiempo justo a Rafa Cabrera Bello. El canario admite que fue una manera amarga de terminar, ya que tuvo muy cerca el triunfo o, al menos, el playoff, pero la lectura general debe ser buena, muy buena. Incluso, Rafa llegó a bromear con su boda que se celebra la próxima semana…
Balance de la jornada… “Empecé algo lento en los primeros nueve hoyos, no jugué demasiado bien. No cometí errores, pero no me dejé opciones de birdie. En los segundos nueve me empecé a sentir mejor, tiré algunos putts muy buenos y obviamente me queda un sabor amargo por el final, ese último bogey que me impidió salir al desempate”.
Una broma divertida respecto a su boda… “Me caso la semana que viene. Obviamente, quiero a Sofia con todo mi corazón y quería dedicarle la victoria. No ha podido ser, aunque espero que todavía diga sí quiero pese a acabar segundo”.
No hay nada que reprocharse… “La moneda no ha caído de mi lado esta vez, pero no me puedo reprochar mucho de esta semana. Vengo de jugar un gran año y ha sido otra buena semana. Me he dado la opción de ganar este domingo y he peleado hasta el último hoyo. No se le puede pedir mucho más a un jugador”.
