Jon Rahm se va a meter en el ‘taller’ los próximos días para hacer un repaso de chapa y pintura tras los tropiezos consecutivos en el Memorial y el US Open. El objetivo de Rahm es detectar dónde puede estar el problema tras los dos cortes consecutivos fallados y ponerle solución de manera inmediata.
Así las cosas, según ha anunciado su web oficial, Jon estará hoy y mañana en San Diego, en los cuarteles generales de Taylormade. Concretamente, se va a meter en el laboratorio para hacer un análisis completo y exhaustivo del swing y detectar así lo que puede estar fallando.
En Taylormade, su marca, tienen todos los datos de su juego y el objetivo es compararlo con lo que está haciendo ahora. Es un test milimétrico que debe servir para encontrar claves. Evidentemente, no hay ningún problema grave en el juego de Jon, se trata simplemente de pequeños desajustes que ocurren varias veces en la temporada en todos los golfistas y que conviene reconducir lo antes posible.
La idea de Jon es estar dos días en San Diego y viajar el viernes de Los Ángeles a París en vuelo directo para afrontar el Open de Francia, torneo del European Tour que se disputa la próxima semana y que supondrá su debut en Europa esta temporada, así como en la serie de torneos de la Rolex Series.
El plan de Jon es llegar a París el sábado al mediodía, descansar esa tarde y el domingo, en compañía de su novia Kelley, y regresar al trabajo el lunes en el Le Golf National de París. Precisamente, un dato interesante en esta planificación es que el lunes y el martes va a trabajar directamente con su profesor, Eduardo Celles, que se desplazará desde el País Vasco para estar con su pupilo.
Con los datos recopilados en los cuarteles generales de Taylormade y lo que vea Eduardo en esas dos jornadas, el objetivo es preparar a Jon para esté al ciento por ciento el jueves cuando arranque el Open de Francia. En definitiva, una sesión de ‘chapa y pintura’ antes de su debut en Europa. Por trabajo y dedicación no va a ser.
