Todavía resuenan los ecos de la gesta de los amateurs Dunne, Niebrugge, Schniederjans y Chesters en el último Open Championship cuando Matthew Fitzpatrick (-12) tiene la ocurrencia de auparse al liderato en el Omega European Masters después de 54 hoyos. El joven inglés dejó el amateurismo hace unos meses, cierto, pero no pasa de los veinte años de edad. El tiempo corre que se las pela: hace un suspiro que Fitzpatrick ganaba el US Amateur (2013) y alcanzaba el Número 1 del mundo amateur… En fin. No deja de ser una muestra más acerca de la excelsa preparación de las nuevas hornadas (de Spieth ya ni hablamos, que cansa).
Eso es, una muestra más. Y no es la única en Crans Montana. En el top-30 del torneo nos encontramos también al italiano Renato Paratore (18 años), al tailandés Janewattananond (19) o los amateurs Schwab (20), de Austria, y Kinhult (19), de Suecia. Recordemos además que tanto Fitzpatrick como Paratore se ganaron los derechos de juego en el European Tour hace ya casi ocho meses en la Final de la Escuela…
Danny Willett (-12) hace tiempo que salió de la guardería y ya es una estrella casi hecha, así que, aunque este sábado no ha tenido su día (en los cuatro primeros hoyos había cometido más errores que en los 36 anteriores), todavía hay que concederle toda la credibilidad y la etiqueta de principal favorito.
Sergio García (-5), viniendo desde las profundidades, entregaba el segundo mejor resultado del día (sólo Fitzpatrick lo superó) para alcanzar un puesto mucho más acorde con las expectativas, aunque aún le queda tarea por hacer. Un portentoso arreón final, acabando la ronda con dos birdies y un eagle, no le va a llegar para discutir a nadie el triunfo, salvo morrocutuda remontada y debacle de numerosos candidatos. Otra cosa sería que las condiciones de juego se complicaran enormemente y el de Borriol fuera capaz de entregar un gran registro. Pero las previsiones, de momento, no anuncian demasiado viento. Alejandro Cañizares (-5), con una vuelta de par, tampoco conseguía moverse lo suficiente como para aspirar a la victoria, mientras que Adrián Otaegui (-1, 72 golpes) se alejaba del top ten y, lo que es peor, de los cheques más jugosos. Al vasco, con su actual situación en la Race, algo ajustada pero no desesperada, cualquier cosa que sume es válida.
