Sergio García tiene una hoja de ruta muy clara en su cabeza para mejorar el putt. Ha tomado una decisión, ha trazado un plan y está dispuesto a ir a muerte con él, con trabajo, disciplina, paciencia y sobre todo convicción.
Podría dar la sensación en los últimos tiempos de que Sergio ha ido un poco a salto de mata con el putter. En cierto modo así ha sido desde el Masters. Ha cambiado varias veces de modelo, alternaba entre el grip normal y el de pinza, incluso a veces en una misma vuelta, y no terminaba de dar con la tecla que le hiciese sentirse realmente cómodo en los greenes.
Realmente, Sergio ha librado en los últimos tiempos una pequeña batalla mental contra sí mismo con el putter. Por ejemplo, en el tema del grip. Él se siente mucho más cómodo pateando con el grip normal, sin embargo cuando agarraba el palo con la pinza la efectividad subía. Por eso, incluso yendo contras sus propias sensaciones, por aplastante lógica numérica, apostaba por la pinza, como por ejemplo en el Masters de Augusta y en tantas otras ocasiones… Hablando en plata, metía más (sobre todo en los putts cortos), pero no terminaba de estar convencido.
Así las cosas, tras probar mucho durante algún tiempo, Sergio ha tomado una decisión firme. Desde el BMW Championship está utilizando el mismo modelo de putter y ha apostado de manera definitiva por el grip normal. Lo tiene claro. “El putt es el mismo desde Chicago y estoy pateando con las manos normal. Aún me falta confianza, pero mentalmente todo este proceso es bueno porque me estoy obligando. Igual no se ven los mejores resultados de manera inmediata, pero creo que puede ayudar mucho en el futuro”, aseguró Sergio.
Así las cosas, de momento la pinza está jubilada, aunque obviamente no hay que descartar que la pueda utilizar en algún momento puntual. “Me siento más cómodo pateando con las manos normal, la sensación es mejor, sobre todo a la hora de la velocidad y la fluidez. Además, con la pinza también he tirado putts que no estaban bien tocados”, asegura.
«Igual que Jordan Spieth mira al hoyo a veces a la hora de patear, yo cierro los ojos en algunos putts para borrar de mi cabeza el hoyo y tener menos presión»
Dentro de ese proceso que está llevando a cabo Sergio para mejorar en los greenes hay una técnica mental que ha introducido este año y que consiste en cerrar los ojos un poco antes de patear en algunos momentos determinados. “Lo vengo haciendo todo el año. Igual que Jordan Spieth mira al hoyo a veces a la hora de patear, yo cierro los ojos en algunos putts para borrar de mi cabeza el hoyo y tener menos presión. Es una manera de centrarme más en el movimiento, lograr más fluidez y estar más relajado”, asegura.
El balance del torneo de Italia en cuanto al putter ha sido positivo. “No metí tantos putts como hubiera querido, pero sobre todo los dos últimos días sentí que los había tirado bien. Después, que entren o no, depende muchas cosas”. Sergio ha encontrado una fórmula y está dispuesto a ir a muerte con ella.
