El danés Thorbjorn Olesen ha sido absuelto de la acusaciones de agresión sexual en un vuelo al Reino Unido desde Estados Unidos en 2019, tras disputar un Campeonato Mundial de Golf en Tennessee, del que había sido acusado. El juicio se celebró en un tribunal de Londres, poniendo fin así a dos años de pesadilla para el golfista.
Olesen fue acusado de tocar los pechos de una mujer, empujar a un miembro de la tripulación de cabina y orinar sobre el asiento de un pasajero de primera clase durante dicho vuelo, un comportamiento que aseguró no recordar después de haber bebido alcohol y tomado pastillas para dormir.
«Pagué un precio muy alto por mi error», aseguró el golfista, cinco veces ganador del European Tour, que ocupaba el puesto 62º del ranking mundial de golf en el momento del incidente y que desde entonces ha caído hasta el puesto 432º. «Su carrera habría terminado» de haber sido declarado culpable, aseguró su abogado tras conocer la absolución.
«Este caso ha tenido un impacto devastador para mí a nivel personal, familiar y en mi carrera deportiva», aseguró el danés en un comunicado. Olesen, que formó parte del equipo ganador de la Ryder Cup de 2018 en París, fue detenido en el aeropuerto de Heathrow el 29 de julio de 2019 tras estas acusaciones y suspendido después por el European Tour a la espera de una investigación (suspensión que la gira levantó el pasado julio por el retraso en el procedimiento judicial).
«Quiero darle las gracias a todos los que me han apoyado en estos dos últimos años y al European Tour por permitirme regresar en 2020. He aprendido de mi error y me aseguraré de no volver a estar en una situación similar. Ahora quiero centrarme en mi golf, olvidarme de cualquier distracción y devolverle la confianza a todos los que han mantenido la fe en mí a lo largo de este trance», explicó Olesen.
En el juicio aseguraron que había bebido cerveza, vino tinto, vodka y champán antes del despegue del avión, después de haber disputado el WGC-FedEx St. Jude Invitational. Dijeron también que Olesen había estado corriendo por el avión «como un niño pequeño», que se quedó encerrado en el baño y que se mostró verbalmente abusivo con la tripulación.
Varios testigos contaron también que Olesen había empujado a uno de los miembros de la tripulación de cabina de British Airways, que había besado la mano del jefe de cabina antes de hacer la señal de la cruz y que había acariciado con su rostro el cuello de una mujer antes de tocar sus pechos. Después, Olesen lloró antes de quedarse dormido, y más tarde se despertó y orinó en el asiento de otro pasajero.
En su declaración, Thorbjorn señaló que quería dormirse en el avión lo antes posible después de haber jugado varios torneos importantes. «No recuerdo nada de lo que pasó tras el despegue, pero me da vergüenza escuchar el relato de lo que hice. Mi comportamiento estuvo completamente fuera de lugar, nunca me había sucedido algo así. Mis acciones fueron el resultado de tomar pastillas para dormir que no había tomado antes con la intención de descansar en el vuelo después de una agenda agotadora», finalizó.
