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Victoria de Tom McKibbin, de 20 años, en el Porsche European Open

Tom, definitivamente, esto es Holywood

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Tom McKibbin - Porsche European Open - DP World Tour
Tom McKibbin posa con el trofeo de campeón del Porsche European Open.

Se puede pensar que lo más impresionante de la victoria de Tom McKibbin en el Porsche European Open fue el segundo tiro del hoyo 18: 186 metros a la bandera, líder con un golpe de ventaja, desde el primer corte de rough y la deja a poco más de dos metros para eagle. Tiene lógica.

Legítimo es también llegar a la conclusión de que no, que lo más impresionante fue el approach desde al rough al borde del lago (dentro del área de penalidad) en el hoyo 15 para dejarse el birdie hecho; o la sacada de búnker del 14, deliciosa, de 14 metros, para firmar el par dado; o incluso el chip desde el semi rough del 12, viniendo de un bogey feo en el 11, para sacar otro par sin sufrir.

Por supuesto, es completamente lícito quedarse con que lo más impresionante es que ha logrado su primera victoria en el DP World Tour con apenas 20 años, cuatro meses y 16 días, sin haber ganado antes un solo torneo en su carrera, con apenas 26 eventos del Circuito Europeo a sus espaldas y pegándose con pastores alemanes como Max Kieffer y Marcel Siem, golfistas que, como diría el gran Luis Aragonés, tienen el culo pelado.

Sin embargo, probablemente lo más impresionante de todo, por encima incluso de su swing, su golf y sus tirazos bajo presión, ha sido su expresión corporal. No se le ha visto un gesto de tensión ni de crispación en los 18 hoyos. Ni siquiera se ha mordido mínimamente el labio cuando su segundo golpe en el hoyo 15 se salvaba del agua por un metro. Tampoco ha habido euforia en la celebración de su triunfo en el 18. Ha sido como si llevara toda la vida haciéndolo, como si fuera un triunfo rutinario, el vigésimo tercero de su carrera. Es paz y tranquilidad, la misma que transmite su swing poderoso y pleno de ritmo. No hay latigazo, no hay descomposición. Es puro equilibrio. Aquí, hay que dar mucho crédito a Dave McNeilly, el veterano caddie que lleva en su bolsa, colaborador en el pasado de Nick Faldo, José María Olazábal y otros grandes jóvenes proyectos como Callum Shinkwin, Matteo Manassero, Chris Wood, Matt Wallace o Rasmus Hojgaard.

Tom McKibbin y Dave McNeilly
Tom McKibbin y Dave McNeilly, durante la última ronda del Porsche European Open. (© Golffile | Pedro Salado)

Es evidente que no hay manera de saber a día de hoy dónde esta el techo de este chico, pero no hay ninguna duda de que estamos ante uno de los proyecto más excitantes de la cantera del golf europeo, a la altura de los hermanos Hojgaard.

Definitivamente, esto es Holywood, así escrito, con una sola ‘L’. Holywood, pueblo de Irlanda del Norte donde, pese a haber nacido en Belfast, se crió golfísticamente. Les sonará lo de Holywood y, más concretamente el Holywood Golf Club, el campo de McKibbin y también el de Rory McIlroy. Rory sí que nació y creció en Holywood. De Rory a Tom. De McIlroy a McKibbin. Historias similares. Los dos se pasaron a profesional con 18 años y cuatro meses y Rory logró su primera victoria dos meses antes de cumplir 20 años, mientras que McKibbin lo ha logrado con 20 años y cinco meses. Holywood, por si se lo preguntan, tiene poco más de 11.000 habitantes.

McKibbin, con su victoria, le plantea un divertido reto histórico a McIlroy. Jamás en la historia ganaron el mismo día dos golfistas de Irlanda del Norte en el DP World Tour y el PGA Tour. Rory McIlroy tendrá la oportunidad de hacerlo si conquista hoy el Memorial. Por si se lo estaban preguntando, tampoco lo habían conseguido dos jugadores de Holywood…

McKibbin se ha impuesto en el apasionante Green Eagle Golf Courses de Hamburgo con una ronda final de 70 golpes. Se ha impuesto con dos de ventaja sobre Julien Guerrier, Max Kieffer y Marcel Siem. Los dos alemanes son los que más le apretaron durante todo el día, así como Jordan Smith hasta que implosionó en el hoyo 15 con un tercer golpe horrible.

La última ronda del Porsche nos vuelve a dejar cristalino que el Green Eagle Golf Courses sigue sin ser amigo de los jugadores españoles. El mejor de los nuestros ha sido Santi Tarrio (PAR), vigésimo tras entregar una tarjeta de 76 golpes, muy marcada por sus dos bolas al agua en el hoyo 16. Triple bogey. El gallego tenía incluso alguna opción de victoria. De hecho, compartió partido con Kieffer, que lo peleó hasta el final con una vuelta de 70. Buen final para Ángel Hidalgo (+3). Una vuelta de par le ha permitido ganar algunas posiciones para acabar 33º. Sumando y sumando puntos para el objetivo de mantener la tarjeta, como el mismo Santi, Alex del Rey o Alfredo García Heredia.

Resultados en directo del Porsche European Open 2023