El joven norteamericano Peter Uihlein (-15) acaba de escribir en Madeira la primera página de oro de su trayectoria profesional, tras hacerse con la victoria en Santo da Serra (Santo Antonio da Serra, Madeira).
Se puede vaticinar tranquilamente que no será la última, en vista de su excelente currículo amateur (ganó el US Open en 2010 y fue Número 1) y, en general, de su innegable potencial como jugador: pegador descomunal, gran pateador…
Hoy ha sido el mejor en el partido estelar con una sólida tarjeta de 68 golpes, dejando atrás a Mark Tullo (-13) y Craig Lee (-12). La gran diferencia estuvo en el último par 5 del recorrido, hoyo 16, donde el americano sacaba el birdie, mientras sus dos rivales y compañeros de partido firmaban el bogey. Además, justo por delante, el danés Morten Orum Madsen (-13), que había llegado al 18 con un parcial de siete menos, terminaba con doble bogey y dejaba una autopista abierta y directa al triunfo a Uihlein.
Como es bien sabido, Uihlein lleva colgada del cuello la etiqueta de hijo de Wally Uihlein, gerifalte de Acushnet (Titleist). Fue precisamente su padre quien le aconsejó que se abriera camino en Europa, una vez que falló la Escuela americana en 2011. Le dijo que su desarrollo sería mejor y más completo como jugador de golf y como persona. Hoy, con el trofeo bien agarrado en Madeira, el norteamericano reconocía que era el mejor consejo que su padre le había dado nunca…
El año pasado se buscó la vida en el Challenge Tour, sin llegar a meterse entre los veinte primeros del ranking a final de año. Y en 2013 ha dado un salto de calidad evidente. Le van, además, las condiciones complicadas de juego, lo que sin duda dice mucho de su calidad, y también de su capacidad de concentración. En El Saler, de hecho, anduvo cerca de las primeras posiciones y por momentos fue claro candidato al triunfo en el Open de España.
Hoy Uihlein fue testigo del golpe del día, un hoyo en uno de Tullo en el hoyo 4, que pegaba un hierro 8 prodigioso desde 185 metros. Pero él siguió a lo suyo, muy certero por los segundos nueve hoyos, que es donde se parte la pana.
Notable y valiente el intento de Raúl Quirós (-2), que ha buscado la remontada desde el inicio con decisión, pero al que ha sobrado un punto de irregularidad (hoy, cinco birdies y otros tantos bogeys).
