Gonzalo nos comenta sus sensaciones horas antes de empezar el Open de Irlanda
La gran novedad del Irish Open que se juega esta semana, en lo que respecta a la Armada española, es sin duda la presencia de Gonzalo Fernández Castaño, tal y como ya informábamos.
El madrileño se ha apuntado al torneo a modo de prueba, simplemente para ver cómo evoluciona su lesión de espalda. Es importante subrayarlo: se trata sólo de una prueba y así lo ven tanto el jugador como los médicos que lo tratan. No se puede hablar todavía de una total recuperación, ni de un regreso a la competición al ciento por ciento. Es más, ni siquiera puede afirmarse que tenga el alta médica definitiva.
Si Fernández Castaño va superando este tipo de exámenes (también espera estar en Chequia para seguir probándose) entra en sus planes incorporarse al Tour de manera regular en septiembre. En la escala de este tipo de exámanes, un primer paso fue su presencia en el reciente Peugeot Alps Tour de Madrid, donde ya jugó 36 hoyos.
El propio Gonzalo cuenta a Tengolf desde Irlanda cuáles son sus sensaciones y en qué estado llega su espalda al evento:
"Mi espalda está mejor, aunque no al ciento por ciento. Puedo andar los 18 hoyos, algo imposible hasta hace poco, pero todavía tengo algunos dolores, especialmente en la zona lumbar izquierda. A lo largo de la vuelta me canso mucho, aunque cada vez menos, y las zonas ilíacas se me van cargando, todavía demasiado".
De momento, sí puede decirse que la lesión, y su prolongado periodo de recuperación, han afectado a su juego. El madrileño lo especifica: "he perdido pegada, mucha con el drive y en torno a un palo con los hierros, yo creo que por varios motivos. El primero, porque los músculos del swing están algo aletargados. El segundo, porque todavía hay algo de miedo inconsciente al pegar a la bola; y el tercero, por una pérdida de potencia y fuerza en las piernas a causa de la falta de vueltas jugadas y por la ausencia de determinados ejercicios en el gimnasio que no he podido hacer por mi lesión. Todo esto hace muy difícil la elección de palos y el control de la distancia".
En todo caso, puede decirse sin exageración alguna que el madrileño anda por Irlanda como niño con zapatos nuevos. "A pesar de los problemas, estoy encantado de volver a jugar, de volver al Tour y del cariño que estoy recibiendo de mis compañeros, los caddies, amigos y en general todo el personal del Tour. Ojalá la prueba salga bien y pueda aguantar los 72 hoyos".
Sería desde luego una sensacional noticia para el golf español, ya que, como hemos significado en varias ocasiones desde su lesión, Gonzalo Fernández Castaño, por resultados y regularidad, es un lujo del que no puede prescindir la Armada.
