Inicio Grandes Circuitos DP World Tour Quirós cogió el putter de Olazábal y las sensaciones eran distintas…

Quirós cogió el putter de Olazábal y las sensaciones eran distintas…

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Álvaro Quirós este sábado en el green del hoyo 9 de Valderrama. © Golffile | Eoin Clarke
Álvaro Quirós este sábado en el green del hoyo 9 de Valderrama. © Golffile | Eoin Clarke

Álvaro Quirós ha repetido una y otra vez en los últimos días que la mejora de sus prestaciones con el putter está siendo clave para él esta semana. Y como tantas veces sucede en este circo del golf (y en el de la vida), tal mejora tuvo su origen en un momento concreto de trabajo, aliñado con un fogonazo de inspiración.

Valderrama se rinde ante su tirano

El lunes pasado el de Guadiaro salía a jugar nueve hoyos, los nueve segundos de Valderrama, junto a José María Olazábal, una pareja de entrenamiento muy habitual en las semanas de torneo. Quirós no daba una en los greenes. Anduvo especialmente desacertado. Así que al acabar, una vez más, Chema se prestó a echarle una mano en el putting green. Y entre unas cosas y otras, buscando una percha a la que agarrarse, el vasco le tendió su propio putter tratando de explicarle algo…

Álvaro y Gonzalo: durmiendo con tu ‘enemigo’

Para empezar, su sensación cambió de cabo a rabo. Así que siguieron por ese camino. Y un rato más tarde el caddie del andaluz, Edu Larrañaga, se iba al camión de Callaway con el Toulon de su jefe y el Kevin Burns de Chema, y con una orden muy concreta: copiad en el Toulon el ‘lie’ del Kevin Burns y la medida de su varilla. Dicho y hecho: puso más ‘up right’ (digamos que ahora patea más con la punta del putter, para entendernos) y acortó una pulgada (2,54 centímetros) la varilla.

Así vivimos la jornada del sábado en Valderrrama

Los resultados y efectos de la ‘clonación’ son evidentes, aunque no se pueda hablar de clones, porque realmente se trata de dos modelos muy diferentes. Y es que, si se permite un chiste muy malo, la vida, para un golfista, es eso que ocurre entre cada pequeña modificación técnica o ajustes y reajustes milimétricos que realiza, ya sea en sus herramientas, en la posición sobre la bola, en el ángulo de subida, el de bajada y demás parafernalia infernal…