Kiradech Aphibarnrat (-12) está de vuelta. Hacía tiempo que no teníamos al tailandés en los puestos de arriba de un torneo. Sin duda, la pandemia, el confinamiento y los problemas para viajar por el mundo le han afectado de una manera especial a este jugador. Se agradece tenerlo de nuevo arriba por su frescura y espectacularidad. Es un golf sin ataduras y muy agradable para el aficionado. Este año ha perdido la tarjeta del PGA Tour y ha caído más allá del puesto 500 del ranking mundial, un duro batacazo para un jugador que llegó a ser 29º hace tres años. Precisamente en 2018 fue la última vez que lideró un torneo después de dos rondas.
Aphibarnrat tiene un golpe de ventaja sobre Laurie Canter y Francesco Laporta y dos sobre Adam Scott, uno de los nombres propios del torneo. El australiano, que viene de ser segundo en el Wyndham Championship del PGA Tour, está recuperando su mejor forma. Será un hueso duro para el resto, especialmente si mantiene ese nivel de ‘destrucción’ de los pares 5 tan brutal. Su parcial es de nueve bajo par en estos hoyos.
Además de Scott, brilla con luz propia el nombre de Justin Rose (-9). El inglés está metido en la pelea por ganar y la victoria lo metería en el equipo de la Ryder Cup. Más presión no se puede tener, pero la está resolviendo de maravilla, a la altura de lo que se espera de un jugador tan grande. Se está ganando la elección de Harrington si llegara el punto. Otro que está con -8 y al que habrá que vigilar de cerca es Billy Horschel. El norteamericano ha firmado unos últimos nueve hoyos espectaculares este viernes con 31 golpes.
Un monumento a Miguel Ángel Jiménez
No obstante, si hay alguien al que poner un monumento en Wentworth es a Miguel Ángel Jiménez (-7). El malagueño, a sus 57 años, está metido arriba en la clasificación. Es el mejor español y está a sólo cinco golpes del liderato. Es impresionante. Recordemos que es con diferencia el jugador más corto del torneo. Promedia desde el tee 240 yardas, cincuenta por debajo de la media del resto de jugadores. Pues con esos 45 metros menos está peleando de tú a tú con una buena parte de los mejores del mundo. Sus maderas, sus hierros largos y su juego corto se encargan de nivelar la balanza. Se está gustando el de Churriana y es una gozada verlo arriba, tan competitivo como siempre.
También han pasado el corte Pablo Larrazábal (-6), que terminaba con dos birdies en el 17 y 18, Nacho Elvira (-4), Rafa Cabrera Bello (-4) y Adrián Otaegui (-3). Por contra, se han quedado fuera Jorge Campillo, Álvaro Quirós y Adri Arnaus, que se salía del corte con un doble bogey en el hoyo 17 y un par en el 18. En los dos últimos hoyos ha firmado un parcial de +3 los dos días cuando Adam Scott, por ejemplo, ha hecho -4. Siete golpes de diferencia muy costosos.
