El Open de España es el mejor banco de pruebas posible para medir el estado de salud del golf patrio profesional. Están prácticamente todos, compitiendo al máximo nivel y midiéndose con una buena parte de los mejores jugadores del circuito Europeo. Es un test interesante y el diagnóstico, hay que decirlo, ha sido óptimo. Podemos estar tranquilos. La salud del paciente es buena y el porvenir, más que jugoso. Vamos con los nombres propios…
-Álvaro Quirós… Es el gran personaje de este Open de España. Con su victoria, ha unido su nombre a los de Seve Ballesteros, Sergio García o Antonio Garrido… Casi nada. ¿Algún día llegará al nivel de los más grandes de España? No lo sabemos, no somos adivinos, pero está en el camino. Lo tiene todo: juego espectacular, cabeza perfectamente amueblada, ambición, instinto, simpatía, cercanía… Su manejo en los pares 5 (-12 en toda la semana) ha sido impresionante. Todos hablan de su driver y no es para menos. Pero hoy merece la pena hacer una mención especial a su putter. Su seguridad con este palo en momentos de máxima presión es brillante. Se llama determinación, y a Quirós le sobra.
Álvaro ha sido el vivo ejemplo de que la cabeza puede con casi todo… El martes, en la ronda de prácticas salió al campo preocupado. No estaba a gusto con su swing. Las sensaciones no eran buenas. Algunas bolas salían bien y otras no… Desconcertante. Cinco hoyos con Pepín Rivero, su entrenador, maestro, confesor y mano derecha fueron suficientes para poner a punto al bombardero. Aquel martes, en la calle del 5 del Real de Sevilla, se miraron Quirós y Rivero y dijeron “ya está, lo hemos encontrado, ahora sólo hay que trabajar en esta línea y esperar a que lleguen los resultados”. Cinco días después levantaba el trofeo de campeón del Open de España.
-Alejandro Cañizares… Es la otra gran noticia de este Open. El martes recibió un nuevo juego de palos, también de Ping, pero de un modelo distinto. Jugó por la tarde sus primeros nueve hoyos de prácticas con ellos y el domingo acabó tercero, con un putt de birdie en el 18 para haber salido al desempate. Lo mejor es la sonrisa con la que Cañi se marchó ayer del Real. Está fino, pegando muy buenos tiros y seguro desde el tee. Ha recuperado la confianza. Pertenece a esa estirpe de ganador similar a la de Álvaro Quirós y también ha transmitido un cambio en su actitud. Se le ha visto más positivo, contento, disfrutando en el campo… Está luchando para que los malos golpes (todos los jugadores los tienen) no le afecten tanto. Está en el camino… El empujón de José María, su padre, el sábado, también pesó lo suyo.
-Carlos del Moral… Cada año da un pasito más hacia adelante. Atrás ha quedado la temporada pasada, muy dura, sometido a una tremenda presión por mantener la tarjeta. Casi desquiciante. Está trabajando en el terreno mental y funciona. Pero lo más importante de todo es que tiene mucho birdie en las manos. Talento. Ayer no sucumbió en la jornada final. Se sobrepuso a un mal inicio y demostró su tremenda clase con los dos eagles en los últimos nueve hoyos. Jugará en Italia esta semana y no lo perderemos de vista.
-Miguel Ángel Jiménez… Valor seguro. ¿Cuántas veces hemos escrito esto? Miles. Y otras miles que quedan. El malagueño nunca cae. Puede tambalearse, no estar fino, los hoyos se moverán unos días más que otros, pero siempre está ahí, dando el callo. Partía como favorito, pero jueves y viernes no le salieron las cosas. Da igual. El fin de semana apretó los dientes, reaccionó y, al final, apenas sin hacer ruido se metió entre los 20 primeros. Y eso que terminó con dos bogeys. El Pisha es mucho Pisha.
-Nacho Garrido… El madrileño ha hecho una más que digna defensa de su fantástica actuación en el Open de España de hace dos años, también en Sevilla. El viernes, el día más duro del torneo, sacó a relucir su clase con una gran tarjeta de 68 golpes. También se ha metido entre los 20 primeros y sigue demostrando que apenas le cuadre todo una semana levantará un trofeo. Su solidez invita a pensar en ello.
-Gonzalo Fernández Castaño… No se ha dejado ver por la parte alta del torneo, pero hay que leer más allá del resultado. Las sensaciones que transmite el madrileño son realmente buenas. Su juego largo está perfecto y sólo le hace falta un poco más de tiempo para adaptarse al Belly putter. Se encuentra más cómodo con este modelo, más consistente, consigue que el movimiento siempre sea igual. Cuando consiga hacerse al peso del palo y a sus características lo volveremos a ver peleando por los títulos. Y será más pronto que tarde. Nos atrevemos a lanzar el siguiente vaticinio: ojo con Gonzalo en Wentworth dentro de 20 días.
-José Manuel Lara… Una de las mayores alegrías de este Open de España. Ha vuelto a pasar un corte y, sobre todo, ha dejado por las calles del Real de Sevilla buenas dosis de la gran calidad que atesora. De la mano de José Carlos Gutiérrez ha recuperado la confianza en su juego. Todo empezó en el Pro-Am del miércoles, donde se hizo ocho birdies. Ha trabajado duro esta semana y los resultados se notarán. No debemos tardar en verlo en los top ten de los torneos. La Armada se alegra especialmente por Larita.
-Jorge Campillo y Pedro Oriol… Jóvenes promesas que poco a poco son realidades. Han pasado el corte en el Open de España. Ese era el objetivo y lo han conseguido. Seguro que esperaban algo más del fin de semana, pero hay que tener en cuenta que apenas han competido durante 2010 y eso se nota cuando se afrontan cuatro rondas seguidas. Ahora jugarán prácticamente ocho semanas seguidas. Tendremos noticias suyas en los próximos dos meses. Campillo está trabajando para tener una mayor consistencia con el driver y más efectividad en los putts de 3, 4 y 5 metros.
-Sebastián García Grout… No puede pasar desapercibido lo que hizo el mallorquín los dos primeros días de torneo. Mantuvo, junto a Carlos del Moral y Álvaro Quirós, la ilusión de la Armada española jueves y viernes, cuando había más nubes que claros. Su fin de semana no ha sido bueno, pero debe marcharse con la sensación de que tiene juego para estar con los mejores. Debe creérselo y centrarse en ello.
-Rafa Cabrera Bello… Sigue afinando, trabajando, buscando su mejor juego… Anda cerca. Ha pasado un nuevo corte y está recuperando la confianza. Otra buena noticia.
-Álvaro Velasco… Está convencido de que su temporada pasa por el Challenge para recuperar la tarjeta del circuito Europeo y torneos como el Open de España le demuestran que está en la buena línea. Su regularidad y consistencia son un aval. Ha hecho muchos birdies en Sevilla y eso siempre es una buena señal.
-Pablo Larrazábal… No ha estado donde a él le gustaría, pero ha pasado un nuevo corte y sigue sumando. El Open de España le motiva especialmente y seguro que en las próximas ediciones lo veremos muy arriba. Atención a la próxima temporada. Se juega en el Prat, su campo.
-Alfredo García Heredia, Luis Claverie, Raúl Quirós, Manuel Quirós, Carl Suneson y Pedro Linhart… Han pasado el corte y ya deben estar satisfechos. Este Open de España debe reforzar su confianza para que asalten sus respectivos objetivos esta temporada. Afredo se ha encomendado al Belly putter, como Gonzalo Fernández Castaño, para traducir en resultado su gran juego largo. Raúl está en plena forma. Si la espalda no le da la lata hará cosas. Manuel, otro valor seguro. Nunca arrojará la toalla y siempre están dando la cara en los torneos.
-Pablo Martín… Es la otra cara del Open de España. No le han salido las cosas, pero hay que estar muy tranquilos con el malagueño porque no es una cuestión de juego. Lo demostró en los primeros hoyos del jueves, donde brilló de manera singular. No remató el resultado y eso le afectó mentalmente. Tiene muchas ganas de completar un buen torneo cerca de su casa y no le termina de salir. Es una presión añadida. Esta semana se marcha a Suiza para trabajar con Pete Cowen.
Una última consideración respecto al Real Club de Golf de Sevilla. El campo ha estado nuevamente sobresaliente, preparado de manera magnífica, alabado por todos los jugadores y por los miembros del circuito Europeo. Este año, además, han conseguido mejorar los greenes. Han llegado al fin de semana perfectos. No se conoce aún el techo de este recorrido español. Pero seguro que pronto volveremos a ver el Open de España por estas tierras.
En cuanto al público, no hubo tanto como en 2008 (será la Feria de Abril, la crisis o las ganas de playa, quién sabe), pero el último día, con Álvaro Quirós jugándose el torneo, la respuesta fue muy buena.
