“Por larga y buena que sea mi carrera será complicado encontrar en ella un partido mejor que el de hoy, con Dustin Johnson y Rory McIIlroy”. Así se expresaba al finalizar su vuelta Tommy Fleetwood (-6), líder provisional del Abu Dhabi HSBC Championship una vez finalizado el turno matutino de juego. El actual campeón entiende, es evidente, que la mejor defensa (de su título) es un buen ataque…
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Estamos todos de acuerdo con el inglés. Johnson y McIlroy pertenecen al reducido grupo de los escogidos. Pero si Fleetwood sigue jugando como hoy (no es fácil, claro), y mucho más si lo hace en las mismas narices de estos megacracks, quizá no tarde en llamar a la puerta de las estancias reales del golf mundial, porque en el recibidor ya lleva tiempo… Tommy, todo equilibrio y energía positiva, ha celebrado con unas horas de antelación su cumpleaños (mañana cumple 27, todavía es un pipiolo, como quien dice…) redondeando una de esas vueltas placenteras con los 18 greenes cazados en regulación, aunque haya que incluir el del hoyo 7, uno de los greenes más grandes del mundo, donde fallaba el golpe desde el tee y se dejaba un putt monstruoso de ni se sabe cuántos metros (gran par el que salvaba ahí). Mañana soplará 27 velas; pero hoy ha soplado 18, una por cada green.
Al margen de Fleetwood, el firmamento europeo ha brillado con luz propia. McIlroy (-3) comenzaba encadenando once pares seguidos y terminaba al alza. El norirlandés despeja así algunas incógnitas después de más de tres meses de parón. Está en la pelea. Igual que Henrik Stenson (-2) o Justin Rose (-1), que también comienzan por debajo del par.
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Dustin Johnson (PAR) y Matt Kuchar (PAR), avanzadilla de élite del contingente estadounidense, tampoco andan demasiado lejos, pero se les ha hecho la jornada demasiado larga. Comenzaban arriba del todo en la tabla por la primera mitad del recorrido e iban perdiendo fuelle. Resultaba curioso, casi sorprendente, ver al número 1 del mundo fallando drives aquí y allá (en el 9, el último hoyo de su vuelta, la enviaba directa al agua de la derecha) después de la exhibición mostrada desde el tee en Hawai, pero ni siquiera este hombre tiene ganado el don de la consistencia por los siglos de los siglos, aunque a veces no lo parezca…
