Miguel Ángel Jiménez (-4) ha dejado otra muesca de su calidad en la primera jornada del BMW PGA Championship. Como si hiciera falta, como si alguien se lo pidiera. El golfista malagueño es el mejor español después de la primera jornada empatado con Pablo Larrazábal (-4). El malagueño se ha metido en el top ten a cuatro golpes de los líderes, Kiradech Aphibarnrat (-8) y Christiaan Bezuidenhout (-8), que acaba de sacarse la tarjeta del PGA Tour a través de las series finales del Korn Ferry. No deja de ser irónico que en un torneo donde tanto hay en juego para la Ryder Cup los dos primeros sean no elegibles para ese torneo.
Sea como fuere, ellos son los líderes y a un golpe se ha colocado Adam Scott (-7), un jugador top que hacía mucho tiempo que no estaba en el European Tour. A dos golpes de Scott están Justin Rose, Masahiro Kawamura y Laurie Canter. Aquí es donde podemos hablar de la batalla por la Ryder. Ahí está Rose peleando por una plaza, ya sea por clasificación directa, para eso tiene que ganar, o por elección.
En clave Ryder, hay que decir que Rose ha sido el primero que ha levantado la mano, aunque todavía queda mucho, más allá de los hombres Ryder, y fijándonos en los españoles, dejando a un lado a Jiménez y Larrazábal, hay que destacar entre los jugadores bajo par a Nacho Elvira (-2), además de a Adri Arnaus (-1), Rafa Cabrera Bello (-1), Álvaro Quirós (-1) y Jorge Campillo (-1). Estos últimos con el -1 en el que ha quedado establecido el corte provisional del torneo.
