Las cosas como son: no debería resultarle muy complicado a la Armada española mejorar esta semana en el Tenerife Open los resultados de la pasada, en Meloneras, Gran Canaria. Allí, el mejor fue Alejandro del Rey, que terminó 21º y, como ya informamos, tan solo en una ocasión en los 181 torneos que se han jugado en España en la historia del circuito europeo, el mejor de la Armada terminó en peor posición (año 1995, Open de Catalonia, en el que José María Cañizares y Santi Luna terminaban en el puesto 25º).
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Además, la pasada semana sólo pasaban el corte seis de los 24 españoles que iniciaban el torneo, un registro que también es a todas luces fácilmente superable. En esta ocasión serán 22 los que pinchen en el tee del 1 o del 10 mañana y lo cierto es que se respira cierto aire de revancha.
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A ver, seamos francos. Este tipo de cuitas son más de los medios que otra cosa, puesto que al fin y al cabo los jugadores de golf van mirando lo suyo y no lo que hacen los compañeros de la misma nacionalidad, por mucho que algunos de ellos sean colegas y amigos. Digamos que ese aire de revancha se enfoca en la mayoría de ellos hacia la necesidad de mejorar sus prestaciones, respecto a la semana pasada, puesto que la mayoría de ellos se quedaban incluso fuera del corte. Pero también existe cierto tono de corporativismo, cuando hablas de ellos con los jugadores. “Claro que escuece el hecho de ver lo mal que lo hizo el golf español en conjunto la semana pasada”, explica Pablo Larrazábal, que al fin y al cabo es el portavoz adecuado, puesto que se trata del jugador español con más torneos disputados del European Tour de todos los presentes (364). Y añade: “Creo que este campo (Golf Costa Adeje) se nos va a dar mucho mejor a los españoles. Si os fijáis, rara es la vez que los golfistas españoles destacan cuando el resultado ganador se va más allá de -20. Yo creo que este domingo vamos a estar por ahí arriba alguno tratando de dar el susto”.
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Lo que nos lleva a una pregunta clara y concisa: ¿hasta dónde se irá en esta ocasión el resultado ganador? Son muchas las voces y opiniones expertas que consideran que no llegará a -20, teniendo en cuenta la dificultad de algunos greenes, con pianos verdaderamente imponentes, la exigencia de algunos pares 3 del recorrido (hay seis en el recorrido tinerfeño), así como el rough que defiende las calles, que sin ser muy penalizador, algo más pica respecto al de Meloneras.
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¿Nos fiamos del gran precedente? En 2003, cuando Kenneth Ferrie ganó el Open de España en este campo, lo hizo con un resultado de -22 y el torneo fue en general un verdadero homenaje al birdie y al eagle (el resultado de -18 se iba hasta el puesto 19º, con eso está todo dicho), pero hay que significar que en aquella ocasión se jugó como par 72 y en esta ocasión será par 71, después de transformar el hoyo 8 en un par 4 largo.
Hoy miércoles sólo han salido a jugar 16 equipos el Pro-Am, así que no eran demasiados los españoles en juego. Pero hay algún dato que nos anima a pensar en que de verdad la Armada se va a tomar la revancha: Nacho Elvira se ha hartado de hacer birdies y de dejar bolas cerca de las banderas, lo mismo que Adri Arnaus. Y Jorge Campillo ha pegado al driver que daba gusto verlo, justo el palo que lo traía por la calle de la amargura…
