Scott Jamieson consigue la última plaza en juego en Europa para el British Open
José Manuel Lara (-12) y Carlos del Moral (-11) han completado hoy una sólida y seria jornada de golf en el desenlace del Open de Escocia. Ambos, eso sí, con un final muy desafortunado que les ha hecho capitular en el último suspiro. De hecho, Lara llego a tener pie y medio metido en el British…
No era sencillo encontrar en la previa de de este torneo en Castle Stuart demasiados argumentos que apuntaran en favor de la Armada. Bajas de última hora (Quiros y Jiménez) y la sensación de que el grueso de la élite del golf español allí presente no pasaba por su mejor momento, nos hacían dudar.
Siempre quedaba el recurso de esperar de nuevo lo mejor de Pablo Larrazábal, reciente ganador en Munich y uno de los jugadores más importantes del circuito este año. Pero incluso él mismo mostraba algunas dudas en jugar allí, pensando en focalizar todos sus esfuerzos en el British y, seguramente, en dar reposo a ese tendón rotuliano de su pierna izquierda, que este año le está llevando en ocasiones por la calle de la amargura…
Pues bien, la Armada ha vuelto a demostrarnos, para gozo del golf español, que termina encontrando recursos en su vasto fondo de armario. Y así hay que significarlo.
Quizá no piense así quien se limite sólo a echarle un vistazo a la clasificación final. Pero lo cierto es que hoy, por momentos, sólo parecía haber un jugador capaz de frenar el huracán Donald. Y ese no era otro que Lara. Hubo un momento clave, jugado a dos bandas, en los greenes de los hoyos 14 y 15. En el primero Lara se enfrentaba a un putt de birdie de unos dos metros y medio. En el segundo el inglés pateaba para birdie desde unos cinco metros. En ese momento el español marchaba con un acumulado de -14, y Donald de -16. Pero la jugada salió al revés: Lara no embocaba y el inglés no perdonaba.
Aún tuvo José Manuel una magnífica opción de birdie en el 15. Tampoco. Y en el 16 una cadena de errores le llevaba al bogey pateando desde un metro. Visto a toro pasado, el valenciano habría necesitado llegar al -15 para meterse en el British, plaza que finalmente ha conquistado Scott Jamieson (-14). La realidad es que Lara lo tuvo casi en la mano. En el 17, par 3, tampoco acertaba a embocar un putt de birdie desde unos dos o tres metros. Y en el 18, par 5, un doloroso bogey como broche terminaba con sus opciones y difuminaba el gran golf desplegado por el español durante toda la semana (hoy, otra vez, cazaba 17 greenes…).
Carlos del Moral (-11) venía hoy desde muy atrás, pero su ataque fue tempranero, profundo y potente. Cuatro birdies por los primeros nueve hoyos (comenzó por el 10), a los que inmediatamente sumaría una ristra de cuatro birdies más consecutivos en los hoyos 2, 3, 4 y 5. Todavía se dejó buenas y variadas opciones, pero en el 9, última parada en el camino, pegaba desde el tee una escapada a la derecha y terminaba con doble bogey… Al final, sea como sea, un gran 66 que por momentos y en honor a la verdad apuntaba más al 63 de Donald o al 62 de Andersson Hed.
El caso es que este joven valenciano (25 años) sigue dando pistas. Mostrando señales de gran jugador. Si Del Moral fuese un boxeador diríamos que tiene pegada, que sus puños hacen daño; si fuera un tenista diríamos que encuentra en su arsenal con relativa naturalidad golpes definitivos, ganadores, 'winners'… Como es un golfista, dejémoslo en que tiene BIRDIE. Mucho birdie. Dispone de una gran materia prima en su bolsa (y bien que la está trabajando…) y le queda ponerle a todo un poco de orden. Le queda asentarse. Y puede que creérselo un poco más.
