Alejandro Cañizares no tiene en estos momentos un patrocinador principal que demande su presencia en la parte frontal de su gorra. El andaluz es libre de poner o usar lo que quiera, hasta podría jugar sin ella, al estilo de sus primeros tiempos en el Tour. Mientras aparece el espónsor, Cañi ha decidido utilizar ese espacio a su favor y darle un buen uso.
CRÓNICA: Cañi se sale y firma el mejor ‘moving day’ de su carrera
La idea partió de su primo Carlos. Fue él quien le sugirió la posibilidad de crear gorras personalizadas. A partir de ahí, Alejandro se puso a pensar en un mensaje. Una de las partes más complicadas en la carrera de un golfista es pasar tanto tiempo fuera de casa. Se echa mucho de menos a la familia y mucho más si cabe en su caso, con una niña pequeña que ni siquiera ha cumplido aún su primer año.
Así las cosas, Cañi pensó que lo mejor era utilizar las gorras para tener un poco más cerca a su familia, sobre todo en este inicio de temporada con viajes tan largos como Sudáfrica, Mauricio y Australia. Seguramente, no había una mayor motivación posible. Se inventó dos. En una creó un logo con forma de rombo con las letras I, A y S, que corresponden a Ingrid, su mujer, Alejandro y Sienna, su pequeña. La otra gorra tiene una S grande en referencia a la niña.
Tengolf pone en marcha el muro de pago y crea el Club Tengolf
Esta semana en Australia ha sacado los dos modelos a pasear. El jueves se puso la primera, con la inscripción de IAS, y hoy sábado ha firmado 64 golpes, la segunda mejor vuelta de su carrera en el European Tour, con la S de Sienna en la frente. Los vueltones así sientan aún mejor. El viernes lució una amarilla como homenaje a Jarrod Lyle, golfista australiano que murió hace poco más de un año a causa de una leucemia.
Estas son las gorras motivadoras de Cañizares. Empezó a utilizarlas en el Alfred Dunhill Championship de Leopard Creek y ahí seguirán mientras no aparezca un patrocinador reclamando el espacio.
Un viaje a Zambia: cuántas cosas se pueden hacer con muy poco…
