Gonzalo Fernández Castaño levantó el trofeo en Shanghai y demostró acto seguido la enorme generosidad de un campeón. El madrileño se acordó de su equipo, con bonitas palabras hacia su caddie y sus entrenadores. Además, se alegró especialmente de romper el mal fario que azotaba al golf masculino español en este 2013.
El momento justo para echarla al suelo y resetear… “Sabía que no iba a ser una ronda fácil, y mucho más por cómo empecé, pegando muy mal a la bola. Pero mi caddie (Jeff Paul) supo tranquilizarme y recordarme lo bien que le había estado pegando a la bola durante toda la semana. A partir del hoyo cinco, donde he dado un tiro muy bueno, le he pegado a la bola sensacional.”.
Tres golpes de ventaja y… final con suspense… “Ha sido una semana sensacional, he jugado muy bien y estoy muy contento. También estoy feliz de haber llegado al último hoyo con tres golpes de ventaja porque ya habéis visto cómo soy capaz de complicarme la vida yo solo. Jugué conservador y al final saqué un doble bogey muy luchado”.
Guiño a BMW y a China donde ya ha ganado dos veces… “Siempre es un placer venir a jugar a China un evento de BMW. Es un gran patrocinador, un gran apoyo para el European Tour y no tengo palabras para agradecerles lo que están haciendo. Gané aquí hace ya siete años y siempre es una alegría volver y poder repetir, y más en una ciudad como Shanghai, que tiene un público excelente y donde se ve que el golf está creciendo muchísimo en los últimos años”.
El trabajo de la semana pasada con José Carlos Gutiérrez y Mariano Bartolomé… “Nunca sientes que puede llegar una victoria. Llevaba algunas semanas pegando a la bola de manera fantástica, pero el putt no me estaba ayudando demasiado. La semana pasada cambié algunas cosas con mis entrenadores y ha funcionado: mover el palo más firme al patear recortando el gesto para pegar más seco a la bola, y activar el recorrido del palo en el juego largo. La verdad es que llevaba semanas pegándole bien a la bola pero no conseguía meter los putts».
La primera victoria española… “Estoy muy contento de que al fin tengamos la primera victoria de la temporada para el golf español y contento también de que me haya tocado a mí. Realmente es inusual que España esté tanto tiempo sin ganar un torneo”.
El fantástico panorama que se le abre por delante… «Me he quitado un gran peso de encima. Ganar este torneo me ha abierto muchas puertas: ahora entro en los Grandes y ya no tendré el estrés de mantener la tarjeta el año que viene en Europa, para poder centrarme más en Estados Unidos. El planteamiento será distinto».
