Adam Scott (-13) ha conseguido hoy en Queensland algo que no es tan habitual en el mundo del golf como pudiera parecer. El mejor clasificado del ranking mundial del torneo se ha llevado el triunfo. Ha conquistado el Australian PGA Championship en el RACV Royal Pines Resort. Despide 2019 por todo lo alto, rompe una sequía de triunfos de casi cuatro años y vuelve a ganar en Australia, en su casa, donde no lo hacía desde 2013.
Scott ha salido como líder solitario este domingo con un golpe de ventaja y se ha acabado imponiendo con dos sobre Michael Hendry y tres sobre un grupo de cinco jugadores formado por Cameron Davis, Wade Ormsby, Nick Flanagan, Min Woo Lee y Yechun Yuan. Las condiciones de juego han sido algo más difíciles que ayer y se ha dejado sentir en los resultados. La mejor vuelta ha sido de 67 golpes, aunque de los que han salido en el top ten, nadie ha logrado bajar de 69, el registro que a la postre le ha servido finalmente a Scott para llevarse el triunfo.
Uno de los que más ha sufrido en el día de hoy ha sido Alejandro Cañizares (-2). El golfista de Manilva ha hecho 77 golpes y se ha dejado en el camino nada menos que 26 posiciones. Ha salido a tres impactos de Adam Scott y ha finalizado a once. Un día para olvidar y una buena muestra de lo complicado que es este deporte. En apenas 24 horas ha pasado de hacer 64, la mejor tercera ronda de su carrera en el European Tour, a firmar 77. Todo ha salido mal de principio a fin. Arrancó con bogey en el hoyo 1 y finalizó con otros dos en el 17 y 18. Ha hecho dos birdies y siete bogeys. No es fácil analizar el torneo y sacar conclusiones positivas sin tener en cuenta lo que ha ocurrido el domingo, pero sí es un buen momento para recordar que el viernes a falta de cuatro hoyos estaba con un pie y medio fuera del torneo. Al menos, consigue sumar unos puntos más en la Race to Dubai.
La victoria de Adam Scott se ha fraguado en el hoyo 15. Tanto hoy, donde conseguía un eagle espectacular, como en toda la semana. Ha sido el gran aliado del australiano. Su parcial en este hoyo los cuatro días ha sido de seis bajo par, con tres eagles y un par. Es decir, ha sacado en esta esquina de Royal Pines prácticamente la mitad del botín total del torneo.
El eagle ha sido determinante por el momento en el que se ha producido. Scott acababa de perder el liderato a manos de Michael Hendry, que se había puesto con -13 merced a un birdie en el 16. Su respuesta ha sido rápida y mortífera. Eagle en el 15 para ponerse con -14. El resto del camino lo ha allanado completamente el propio Hendry con dos bogeys en el 17 y 18. Scott ha pegado su segundo golpe en el 18 sabiendo que tenía tres golpes de ventaja. Una alfombra roja.
Es la primera victoria de Adam Scott desde el WGC México Championship de 2016. Han pasado desde entonces tres años, nueve meses y 16 días. Jamás había estado el australiano tanto tiempo sin ganar desde que disputó su primer torneo allá por el año 2000, el Greg Norman Holden International. Desde entonces, ha jugado 470 campeonatos valederos para el ranking mundial y ha logrado, con la de hoy, 28 victorias.
Desde que inauguró su palmarés con el Alfred Dunhill Championship de 2001, Scott había ganado al menos un torneo cada año, a excepción de 2015 y la citada sequía rota con este triunfo. Su mayor periodo de tiempo sin ganar antes del de ahora fue entre el Crown Plaza Invitational de mayo de 2014 y el Honda Classic de febrero de 2016. No cabe duda de que se ha quitado un buen peso de encima. En ese tiempo, sus principales problemas, como siempre en su carrera, han estado en el putt. Con ese triunfo, Scott asciende cinco posiciones en el ranking mundial y se coloca decimotercero. Es su puesto más alto desde el 11 de junio de 2017.
