Sergio García (-5) ha hecho algo más que cumplir en la primera jornada del Portugal Masters. Su arranque de torneo (66 golpes) lo mete ya de entrada entre los candidatos, excelente noticia teniendo en cuenta de dónde venía (malos resultados y frustración en el campo de golf) y a donde vamos (Golf National de París)…
Por delante del español, con el turno matutino de juego finalizado, sólo están los ingleses Wallace y Pepperell, ambos con -7, y el chino Haotong Li (-6), todos ellos primeros espadas de la cita. La puesta en acción de Wallace, además, ha sido de dibujos animados: salvaba el par en el 10 tras declarar su bola injugable; volvía a salvarlo en el 11 después de irse al agua desde el tee; y en el hoyo 12, par 5, se apuntaba un eagle sin haber pisado el fairway, tras embocar un aprochito a la vera del agua… Marchaba dos menos después de tres hoyos y bien podía ir tres más. Tiene algo especial este Wallace.
Cada cual con su objetivo y Celia en el de todos
Volvamos con Sergio. Mejor no pongamos campanas a repicar, pues queda mucho por delante y las semanas de golf son largas, pero las perspectivas de cara a la Ryder son buenas ahora mismo, a día de hoy. Si el de Borriol venía a rodarse y a ver cómo se manejaba en competición, el primer test ha sido muy positivo. Dejémoslo ahí por el momento y vayamos analizando día a día. Así es como quiere ir él también, paso a paso, aunque eso no quita para que se ponga un notable alto como nota de este primer examen, precisamente porque llevaba cuatro semanas sin competir.
De negro riguroso en memoria de Celia Barquín, el jugador español salía por el 10 del Dom Pedro Victoria Golf Course sereno y dispuesto, cometiendo pocos fallos de entrada. Alguno más por los segundos nueve hoyos, aunque oportunamente alternados con disparos sobresalientes, como los dos que pegaba desde el tee en los dos pares 3 (hoyos 6 y 8). Hemos visto mejores y más poderosas versiones de Sergio García, es cierto, pero sea como sea ha sido eficaz y solvente. Y además terminaba enchufando un putt de unos tres metros para salvar el par en el hoyo 9, de esos que saben a gloria y que definitivamente confieren un tono u otro a la ronda.
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El castellonense de momento comanda unas interesantes maniobras de la Armada en este inicio de torneo, porque son varios los jugadores que han ganado con autoridad al campo. Gonzalo Fernández Castaño (-4), por ejemplo, que ha sacado adelante un 67 de mucho valor, teniendo en cuenta que sólo ha cogido cuatro calles… Su putter aún echaba humo al finalizar la ronda. Vaya manera de enchufar y de arreglar entuertos con este palo.
Alejandro Cañizares (-4) también ha comenzado de la mejor manera, al igual que hiciera el año pasado. Además de jugar un golf muy sólido, se ha sentido muy bien físicamente en el campo: ni una molestia en la muñeca ni tampoco en la costilla que se dañó la semana pasada en Holanda.
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Justo por detrás se agolpan también muy bien situados Nacho Elvira (-3) y Pedro Oriol (-3). Elvira comenzaba con bogey en el hoyo 10, pero a partir de ahí no volvía a perder la senda. Oriol, al igual que Cañi, necesitan sumar euros y confianza y hoy desde luego lo han hecho. Pep Anglés (-1), por su parte, terminaba con dos birdies en el tramo final para ganar al campo.
