Richard Finch (-10) ha sido el vencedor del Irish Open que hoy ha finalizado en el Adare Manor de Limerick (Irlanda)…
El inglés es el primer jugador que consigue su segunda victoria esta temporada en el circuito europeo, después de ganar en Nueva Zelanda.
La foto de la jornada, sin duda, es el remojón de Finch en el hoyo 18, a donde llegó con el torneo en su mano, ya que ninguno de sus rivales aguantó el mano a mano con él en los últimos nueve hoyos. El inglés se cayó al río después de dar su tercer golpe en el hoyo final, pero la bola fue a green y seguro que el chapuzón mereció la pena (un doble bogey ya le valía para ganar).
Finch es un ejemplo más de la grandeza y el misterio del deporte, mucho más si hablamos de golf. Este jugador luchaba desesperadamente hace sólo siete meses por mantener la tarjeta del circuito europeo. Necesitaba una buena clasificación en el Mallorca Classic, última cita de la temporada (tenía que conseguir, aproximadamente, un puesto entre los quince primeros), y fue séptimo, lo que le valió para sumar un total de 235.000 euros en 2007 y mantener la tarjeta. A partir de ahí… victoria en Nueva Zelanda y en Irlanda y más de 700.000 euros en su bolsillo este año que le permiten aspirar seriamente a entrar en el equipo europeo de la Ryder. ¿Cómo lo ven?
El golf español ha estado ahí hasta casi el final, aunque ninguno de los tres jugadores con opciones de victoria consiguió redondear ese gran día que necesitaban para poder ganar.
Aún así, su rendimiento fue muy bueno. En un día donde por fin vimos el clásico paisaje irlandés, con más nubes y lluvia, Álvaro Quirós (-5) ha conseguido firmar un importante top-ten de prestigio que, además, debe suponer un repunte y reafirmación de enorme importancia, ya que este año Quirós había jugado diez torneos antes de llegar a Irlanda y no había pasado el corte en siete de ellos. Es su mejor resultado, justo cuando llegamos al meridiano de la temporada y se acercan las citas más importantes.
Álvaro Velasco (-3 y puesto 13º) y Pablo Larrazábal (-2 y puesto 16º) también pueden estar satisfechos porque han estado toda la semana con los mejores. Velasco se ha afianzado entre los cien primeros del Orden de Mérito europeo y sigue jugando a gran nivel. Y Pablo… De nuevo tuvo que luchar contra un traicionero doble bogey, pero volvió a hacerlo con gallardía y solvencia. Estos dos jugadores siguen arrimándose y, sobre todo, demostrándose, que en una buena semana pueden dar la campanada sin lugar a dudas.
