Sergio García se mostró muy feliz nada más terminar su ronda. Estaba contento por el resultado, pero sobre todo por el juego…
Perfeccionista como pocos, entiende que sus primeros diez hoyos del jueves en Augusta son para ponerles un marco. Es difícil jugar mejor. «He jugado excepcional los diez primeros hoyos. Nunca había jugado tan bien en Augusta ni casi en toda mi carrera. Eso es lo que voy a intentar llevarme a la cama esta noche», explicó.
Sergio recuerda lo difícil que es hacer una vuelta tan baja en el Masters tras las modificaciones que se hicieron en el campo. «Los primeros diez hoyos me han enseñado lo bien que puedo pegarle a la bola. Podría haber hecho perfectamente siete u ocho bajo par en ese tramo. Fue muy bueno, y no con el pitch en la mano, sino con hierros 4, 5 y 6. En los últimos ocho mantuve la compostura, aunque no le pegué tan bien», afirma.
Sergio reiteró que Augusta no está entre sus lugares favoritos, pero eso no quita que siempre venga al Masters con la idea de hacerlo lo mejor posible y darse una oportunidad de ganar. «No es mi campo favorito, pero intento disfrutar cada vez que vengo aquí. A veces es mejor que otras. Hoy ha sido uno de los días buenos, así que toca disfrutar mientras dure. Hoy ha sido uno de esos días en los que realmente he disfrutado muchísimo y ojalá sean igual los próximos tres y a ver qué pasa el domingo».
En cuanto a sus declaraciones el año pasado tras la tercera ronda del Masters, en las que dijo que no se sentía capacitado para ganar aquí, García mantiene lo mismo que ha venido diciendo estos días. «Lo dije en un momento de frustración y posiblemente no fue el mejor momento para hacerlo, ni la manera, pero es lo que sentía entonces. De todos modos, como dije antes, siempre intento dar lo mejor de mí mismo y hoy ha sido muy bueno, espero que siga así el resto de días».
