Putting green de Doral. Miguel Ángel Jiménez patea y escucha. Escucha consejos. «Así, así se ve mucho mejor…». Enfrente no hay ningún gurú, ningún compañero del tour, quien está enfrente es Miguel Ángel, su hijo mayor de 18 años.
“Yo siempre he dicho que estás toda la vida aprendiendo, él tiene los fundamentos y claro que un chico joven puede dar buenos consejos. Hay que apreciarlo todo”, asegura Miguel Ángel padre, orgulloso, mirando a su hijo, que está estudiando Business Major en la Universidad Nova Southeastern de Fort Lauderdale, en Miami.
Los consejos, obvio, son de ida y vuelta. Es una charla de padre a hijo, como esa que de forma tan bonita reflejó Cat Stevens en su clásico Father and Son. “Que cómo está su golf… bien, aprendiendo, mejorando, poco a poco, no hay prisa… y los estudios también van bien (acota Jiménez), que es lo que queremos nosotros. Hay que tener los huevos en dos canastos, que nunca sabes lo que puede pasar con el deporte, un esguince o cualquier cosa y se va todo al traste”, señala el de Churriana ante la mirada atenta de su hijo, que gentilmente nos ayuda durante la entrevista. Stevens empezaba la canción así: «No es tiempo de hacer cambios, tranquilo, tómatelo con calma, aún eres muy joven y te queda mucho por saber». Lo podría haber firmado Miguel.
Lo que estaban trabajando en el putting green tiene que ver con las sensaciones. Jiménez percibe que a veces está más agarrado de la cuenta al palo, que no fluye, y su hijo le ayuda a encontrar esa suavidad. Ayer trabajaron y jugaron 18 hoyos, y hoy han vuelto a jugar nueve, los nueve primeros. Hay muchos cambios en el Blue Monster y hay que asumirlos lo más rápido posible.
Miguel está contento con los cambios. “Está más exigente y eso siempre es mejor, más selectivo. No tiene mucho rough, pero no le hace falta. El agua entra más en juego y los greenes son más grandes y muy movidos”, resume en breves pinceladas agarrado a un hierro 6 de PING, su eterno compañero de viaje en el tour.
Jiménez está buscando recuperar las mejores vibraciones, esas que le llevaron a pelear por la victoria en Abu Dhabi y que últimamente no afloran tanto como al malagueño le gustaría. Por trabajo y buenos consejos no va a ser.
Aquí les dejamos la charla con Jiménez, una charla sobre golf y sobre la vida.
