Después de más de seis horas de juego de la tercera jornada del WGC Cadillac sólo se habían entregado cuatro tarjetas por debajo de setenta golpes en el Trump National Doral… Y las dos mejores (sendos registros de 67 golpes) correspondían a los dos españoles presentes en este primer campeonato del mundo del año, Sergio García (-5) y Rafael Cabrera Bello (-5), que marchando en partidos consecutivos y viniendo desde la mitad de la clasificación asaltaban provisionalmente el top-ten del torneo.
Además, dado que las condiciones de juego son picantes, con el viento entrando en acción más que en jornadas anteriores, ambos terminaron el día muy arriba en la tabla y, por lo tanto, se ha metido en los últimos partidos del domingo. Un fantástico logro el de los dos españoles que, sorprendentemente, cada día se han ido pisando el uno al otro el resultado hasta clavarlo: 73 el jueves, 71 el viernes y 67 el sábado. Sus vueltas hoy tienen mucho mérito. De los jugadores que ya han terminado, tenemos a cinco que han tocado 80, Dubuisson o Fraser, líder el primer día, entre ellos. Otros resultados que comparativamente ayudarán a valorar más la actuación de los españoles son los 75 de Shane Lowry, Billy Hosrchel y An o los 74 de Patrick Reed o Branden Grace. Justin Rose, por citar uno más, hacía hoy 72 golpes.
Ambos han mejorado todas sus estadísticas, evidentemente. El canario ha sacado a pasear el juego largo que viene mostrando en este 2016, aunque seguro que él aún no está contento con el rendimiento que ha ofrecido desde el tee, puesto que todavía ha dejado un buen puñado de calles vírgenes. Pero es que este campo es muy exigente precisamente desde el tee y la mayoría de sus errores han sido leves. En cualquier caso, los ha compensando con brillantez, llegando a sumar hasta siete birdies en su ronda. Rafa se ha mostrado casi impecable desde los tres metros de distancia en los greenes, y terminaba la vuelta salvando dos pares muy valiosos y siempre delicados en los hoyos 17 y 18.
Otra buena muestra de lo valiosa que ha sido la vuelta de Rafa es que ha ganado por cinco golpes a su compañero de partido, que no era otro que Kevin Kisner, uno de los golfistas de moda este año en el PGA Tour, no en vano ocupa la segunda plaza en la FedEX Cup.
Muchos años viniendo al Blue Monster (de amateur y un par de ellos como pro), casi siempre me haces daño pero hoy…. Hoy te hice pupa
— Rafael Cabrera Bello (@RCabreraBello) 5 de marzo de 2016
Algo muy parecido podría decirse de Sergio, que todavía puede pegar con más finura con el drive en las manos, pero que en cualquier caso sigue pateando con autoridad e intención y que hoy ha cazado más del ochenta por ciento de los greenes en regulación, con un solo borrón en la tarjeta (bogey en el 14).
Es la primera vez que Rafa baja de 70 golpes en Doral, y lo ha hecho en su undécimo intento (había jugado ya aquí dos ediciones), pero en un recorrido mucho más exigente tras la profunda remodelación de 2014. Otra prueba más de la madurez y evolución del canario, que este domingo va a intentar dar un paso decisivo en su intento por jugar el Masters de Augusta (necesita meterse entre los cincuenta primeros del mundo y ahora mismo es 61º).
