Después de más de dos meses de parón en los campos de golf madrileños y con muchísimas ganas de ver a los golfistas, los clubes han abierto sus instalaciones reiniciando su actividad y extremando las medidas de prevención, seguridad y desinfección.
El golf es salud, es aire libre, es naturaleza y un deporte que puedes jugar en partidos de hasta 4 jugadores o contigo mismo. Todos los que practican golf coinciden en afirmar que el golf es medicina, salud y que puede mejorar y alargar la vida.
El sistema para reservar salidas al campo es telemático y es necesario reservar online o por teléfono para seguir las medidas de seguridad. El Real Club de Golf La Moraleja a pocas horas de abrir el nuevo sistema de reservas ya había llenado los 4 recorridos que tiene en su haber.
El Centro Nacional de Golf abrió ayer sus puertas con cita previa, a través de la web oficial para controlar el acceso y el aforo. El acceso fue sencillo. Los jugadores llegaban en coche, aparcaban, iban directamente al campo y después de jugar, volvían a sus coches.
En palabras de Juan Antonio Fernández Hernando, director general del Centro Nacional de Golf:
«Nos esperábamos bastante gente por las ganas que tienen muchas personas, pero de momento se está gestionando muy bien. No queremos que se masifique el centro y por ello solo están abiertos los campos de juego y el aforo está rondando el cincuenta por ciento.
«En un campo de golf como este, con setenta hectáreas, mantener la seguridad es muy fácil. Puedes ir andando o hablando en un espacio muy grande sin acercarte al otro compañero».
Enrique Gil Octavio de Toledo, gerente del Real Club de Golf de la Herrería estaba exultante ayer lunes:
“El sábado a las 21:30 horas, se abrió la página web y nuestra App y en los primeros 10 minutos se hicieron 235 reservas. Al finalizar el domingo había un total de 277 reservas para ayer lunes. Toda una demostración de alegría por volver a la normalidad a través del golf.
Como principal anécdota del día fue por la tarde cuando cayó un tormentón durante 15 minutos. Ningún jugador nadie salió del campo, todos empapados y emocionados de poder volver a practicar su deporte favorito”.
Larga vida al golf.