El Andalucía Costa del Sol Open de España que se disputa esta semana en Guadalmina pone punto y final a la Race to Costa del Sol y, por tanto, a la clasificación del ranking del año del Ladies European Tour. Sin embargo, como no podía ser de otra manera, este maldito Covid 19 que todo lo ha trastocado también tiene su influencia en la Race. Así, nadie va a jugar esta semana sobre ese delicado alambre de los descensos, ‘permanencias’ o incluso ascensos, como tocaría si todo fuera normal. Nadie, salvo la que se lleve al triunfo al final de los 72 hoyos, que sí adquirirá para la temporada que viene la categoría de ganadora.
Eso sí, la ganadora de la Race, que ya tiene nombre y apellidos, puesto que ninguna otra puede alcanzarla, la danesa Emily Kristine Pedersen, será considera como tal a todos los efectos, faltaría más.
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Por eso, chicas, y dentro de lo malo y de las desventajas y molestias que la pandemia ha traído, al menos este año toca pegar relajadas y sin miedo, puesto que lo único que hay en juego es el triunfo, ni más ni menos. Y con esa jugosa y nada habitual bolsa de premios de 600.000 euros…
Y ya que hablamos de laureles y triunfos no queda más remedio que enfocar a la gran favorita, Azahara Muñoz, una vez que la defensora del título, la holandesa Anne Van Damm (ganadora en 2018 y 2019), no ha tenido a bien regresar. Una decisión ciertamente sorprendente y hasta decepcionante (visto el caso desde nuestra perspectiva, por supuesto). En fin, dejémoslo ahí. Y sigamos con Azahara, puesto que además ella juega en casa, en el campo que la vio crecer, hacerse jugadora y persona y también ganar este mismo torneo en 2017.
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“Nunca en mi vida había visto el campo tan bien”, señala Muñoz sin dudar después de jugar hoy nueve hoyos. Y así es, comenzando por los greenes, que están fantásticos. Ahora sólo hace falta que la meteorología acompañe un poco y los partes no se cumplan al pie de la letra, pues a priori se espera mucha agua. Sea como sea, el resultado ganador podría irse tranquilamente a un registro en torno al -18.
Azahara podría alcanzar incluso el segundo puesto honorífico en la Race en caso de victoria, pero no puede alcanzar a Pedersen, como ya ha quedado dicho. Precisamente la danesa, que llega en un gran momento de forma, puede convertirse en la principal amenaza de la española. Tampoco podemos olvidarnos de las dos compañeras de partido de la malagueña, la sueca Caroline Hedwall, siempre peligrosa cuando está inspirada, o la alemana Olivia Cowan, que antes o después dará el salto al club de las ganadoras.
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Algo nos dice, en todo caso, que la Armada femenina puede hacer ruido del bueno, ya que no habrá público para jalearlas (maldito bicho…). Por eso digamos que Nuria Iturrioz y Luna Sobrón pueden estar también perfectamente al quite.
